Alta relojería suiza para una cocina irresistible
La alta cocina requiere de la precisión con la que un maestro relojero elabora minuciosamente las piezas que hacen funcionar su precioso mecanismo. La compañía suiza Breitling ha creado la simbiosis perfecta entre alta relojería y la más excelente cocina.
El tiempo es una herramienta imprescindible en la alta cocina. Igual que el delicado mecanismo de un reloj, los chefs de alta cocina trabajan con precisión suiza cuando se enfrentan a los fogones. Por ello, Quique Dacosta, Maca de Castro y Mario Sandoval, tres representantes de la alta cocina española, han decidido lucir un reloj de Breitling en su muñeca cuando cruzan las puertas de las cocinas más prestigiosas de nuestro país.
Cada segundo en los fogones de estos grandes chefs cuenta. Breitling, la compañía suiza especializada en relojes de pulsera, les ha hecho embajadores de su prestigiosa marca. La precisión, innovación, modernidad e investigación son atributos que Breitling y sus chefs comparten y que, unidos, crean una fusión perfecta.
Este año, Breitling se ha propuesto que la alta cocina y la alta relojería trabajen de forma conjunta. Un ámbito con el que la marca comparte la labor de equipo, la búsqueda constante de la excelencia y la calidad.
Los tres chefs coinciden: el tiempo es imprescindible en la cocina y un reloj de Breitling en la muñeca es un aliado fundamental para su trabajo. Para los cocineros, el tiempo es un ingrediente más en la receta, que combinado con la temperatura y el
peso forman el triángulo perfecto para que un plato sea único. "Como un maestro relojero cuida al detalle cada pieza que elabora minuciosamente, los chefs somos artesanos que escogemos el tiempo que dedicamos a cada elemento de la receta para diferenciarnos del resto", sostiene Sandoval.
Maca de Castro asegura que ser embajadora de Breitling conecta la alta relojería y la alta cocina. Dos corrientes marcadas por la perfección y la precisión. "Cuando empezamos a trabajar tenemos que ser como un reloj", apunta la mallorquina.
"Ser embajador de una marca que lleva como código la excelencia, la precisión, la modernidad y la investigación está dentro de mis valores de cocinero y de persona, por lo que es una simbiosis natural", añade Quique Dacosta.
Los tres chefs llevan años en la alta cocina, un camino que requiere "trabajo, sacrificio y mucho tiempo para que tu cocina tenga una identidad", explica Sandoval. Para él, la cocina española tuvo una época dorada, representada por chefs como Ferran Adrià, Juan Mari Arzak, Martín Berasategui o Pedro Subijana, que mostraron el camino a esta llamada 'cuarta generación'. "Nos dejaron un legado de excelencia, de esfuerzo, de creatividad, de innovacón, de amor por el producto, de defender a los agricultores y pescadores...". Este legado es el que posibilitó que España sea hoy una gran potencia mundial en la esfera de la alta cocina. Una posición que, aseguran, España va a mantener, al menos, una década más. "Estamos con mucha energía para seguir demostrando que España tiene la mejor gastronomía del mundo", dice de Castro.
Una gastronomía que, además de apostar por la dieta saludable, está tomando conciencia ecológica. Sandoval asegura que comparten con Breitling "la filosofía de que tenemos que dejar un mundo mejor" y que tanto la marca como los chefs apuestan por el reciclaje de los materiales que utilizan en su día a día y caminan paralelamente en defender los valores de la buena alimentación, respetando el ecosistema que la hace posible.
"En la cocina, cuando empezamos a trabajar, debemos tener la precisión de un reloj"