Segunda juventud.
¿Es rentable un coche con más de 30 años?
Quien tiene un coche clásico, tiene un tesoro”. Sí, me he permitido el gusto de parafrasear la popular expresión de “quien tiene un amigo, tiene un tesoro” para extrapolarla al mundo del automóvil. Es un arranque fácil, pero ¿quién cree que no es verdad lo que acabamos de afirmar? Como en muchos ámbitos de la vida, los vehículos clásicos generan división de opiniones. Hay quienes los ven como hierros inservibles, pasados ya de moda, que nada tienen que hacer contra los vehículos de nueva factura, más modernos y con un sinfín de gadgets. En cambio, un servidor se postulo más en el lado de quienes opinan que, como dirían en el ámbito flamenco, ‘tienen duende’. Solo hace falta ver un aparcado para saber que tienen algo de especial. Quizá sea porque seguramente están repletos de anécdotas y vivencias –ay si pudieran hablar–, o quizá sea por lo sencillo que resultan en su construcción, pero lo cierto es que los coches clásicos sigue teniendo mucho tirón entre los que nos consideramos apasionados de las cuatro ruedas.
Cambios en la normativa
Hasta ahora para poder matricular tu querido coche como vehículo histórico, tenías que esperar a que cumpliera los 25 años. Sin embargo, desde el pasado mes de mayo, coincidiendo además con la última modificación de las ITV –de la que te hablamos en profundidad en el anterior número de la revista–, la nor- ➥
Desde mediados de 2018, para que el coche sea considerado como histórico deberá tener al menos 30 años