Reinventa la movilidad
Lo último de Citroën no es un coche, sino un cuadriciclo ligero biplaza y eléctrico que se presenta como un ‘objeto de movilidad’, no necesita carnet de conducir y está enfocado a la ciudad
itroën ha logrado sorprendernos muchas veces. La firma de los dos chevrones lleva más de un siglo innovando, pero nunca de la forma que lo ha hecho con el inédito AMI eléctrico. No podemos llamarlo coche, porque no lo es. Se considera cuadriciclo ligero y para llevarlo sólo hace falta tener 15
Caños y el carnet AM, el equivalente a la antigua licencia de ciclomotor.
Va enfocado, por tanto, a un público diferente al habitual de Citroën. De hecho, la marca francesa lo define como un ‘objeto de movilidad’ pensado para desplazarse en ámbitos urbanos, por lo que se suma a las alternativas que ya existen en las ciudades, como los patinetes eléctricos, el carsharing, el motosharing, la bici y el transporte público. Obviamente, no es fácil plantar cara a tantas formas de desplazamiento, pero el AMI cuenta con varios reclamos. En primer lugar, la mencionada posibilidad de conducirse con un permiso que se puede obtener mucho antes de cumplir los 18 y sin ha
cer exámenes. Otra de sus virtudes es la facilidad de manejo. Un volante, dos pedales –acelerador y freno–, tres botones –para avanzar, la marcha atrás y el punto muerto–, la palanca de los intermitentes, que sirve también para activar los limpias y el claxon, y una pequeña pantalla que aporta información sobre la velocidad, la autonomía restante y el kilometraje total. No tiene nada más.
Aliado urbano
Gracias a ello, conducirlo es tan sencillo como montar en bici. Se desenvuelve con soltura entre el tráfico, en parte por lo pequeño que es y por su diámetro de giro de apenas 7,20 metros, pero también porque acelera bien desde parado. No es tan cómodo, práctico, seguro y rápido como un coche, de hecho, sólo alcanza 45 kilómetros/hora, pero es útil en pequeños recorridos y a diferencia de las bicis, patinetes y motos, protege del aire y la lluvia.
Luego está el diseño, que puede gustar o no, pero llama la atención porque no existe nada parecido. Además, sólo necesita tres horas para cargarse al 100% en un enchufe convencional. Pero lo más interesante es el precio; a partir de marzo se venderá vía web desde 6.900 euros y también podrá alquilarse desde 19,99 euros al mes –2.641 euros de entrada–. Con semejante tarifa y el resto de alicientes, todo apunta a que esta nueva solución de movilidad funcionará…