CÓMO UTILIZAR CORRECTAMENTE UN ESPECTROFOTÓMETRO
A la hora de utilizar un espectrofotómetro se aconseja seguir una serie de pasos para que el acabado sea correcto. 1. Calibrar el dispositivo. Antes de comenzar, el espectrofotómetro se debe calibrar según las indicaciones del fabricante. Por lo general, la calibración se realiza en blanco y negro con una serie de placas proporcionadas por la marca. Este proceso debe realizarse de manera periódica para garantizar que la calibración sea perfecta en todo momento. 2. Superficie de medición. Para evitar errores en la medición, lo ideal es limpiar la superficie, pulirla y realizar la lectura en una zona libre de arañazos. Esta superficie de medición debe ser lo más plana posible y cercana a la zona que vamos a repintar. Si la zona es muy curvada es posible que los sensores no apoyen bien y que, además, se filtre luz. Por último, es conveniente que la superficie se encuentre a una temperatura de entre 15 y 25 grados. Con temperaturas muy altas o muy bajas el dispositivo puede arrojar errores de lectura. 3. Tamaño de partícula. En los acabados con efectos se debe tener en cuenta también el tamaño de partícula, ya que si no coincide se notará la diferencia entre ambas pinturas aunque se haya conseguido un buen ajuste de color. 4. Lecturas y toma de datos. Por lo general se recomienda realizar diferentes lecturas y tomas de datos para contrastar la información. Lo ideal es realizar entre tres y cinco mediciones con ángulos distintos. Esta información la podemos afinar en el software incorporando otros datos, como la marca del vehículo, el tamaño del grano, el tipo de acabado, etc. Pintado de muestra. Una vez identificado y preparado el color, se recomienda pintar una muestra para compararla con el vehículo antes de realizar el pintado completo. Los ajustes se deben hacer en esta fase.