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Refrigerantes en climatización: retos y objetivos a conseguir
FACTOR INFLUYENTE. La asignación de cuotas, expresadas en Ton de CO2 equivalente, a cada productor o importador, derivadas de la aplicación del Reglamento Europeo F-gas, provoca un nuevo escenario en cuanto a disponibilidad de gases refrigerantes en el me
Gases fluorados: análisis de la normativa actual
(Reglamento CE 517/2014)
El nuevo Reglamento CE 517/2014, aplicable desde el 1 de enero de 2015, tiene como objetivo proteger el medio ambiente y establece un calendario de prohibiciones a la comercialización de los gases fluorados, a los que se responsabiliza en buena medida de las nefastas consecuencias del calentamiento global. El gran problema al que se enfrenta la industria de la climatización viene derivado de que no todos los refrigerantes comercializados en la actualidad, a excepción del R-134a, (R-407C, R-410A) disponen de un sustituto directo de menor PCA. Además, los usos y aplicaciones de algunas de las nuevas alternativas del grupo L2 (ligeramente inflamables) están limitados a la espera de la aprobación y publicación del nuevo reglamento de seguridad que modifique su manipulación.
El 31 de diciembre de 2014 marcó la prohibición total de la utilización de HCFC en Europa. La siguiente fase es el efecto invernadero, uno de los efectos más comentados en estos años. Se responsabiliza a los gases fluorados de todo el calentamiento global y de las nefastas consecuencias del mismo. Es cierto que algunos fluorados tienen un PCA (Potencial de Calentamiento Atmosférico) muy alto, aunque su contribución a nivel mundial suma menos de un 1% de todas las emisiones de gases de efecto invernadero.
El nuevo Reglamento CE aplicable desde el 1 de enero de 2015 es de aplicación directa en los países de la Unión Europea, amplía las obligaciones y establece un calendario de prohibiciones a la comercialización de los gases fluorados. Este nuevo Reglamento CE 517/2014, que deroga al anterior Reglamento CE 842/2006, tiene la finalidad de reducir las emisiones de ciertos gases fluorados y mejorar su contención y control, así como establece restricciones de comercialización y uso. El reglamento CE 842/2006, vigente hasta finales del año 2014, se centraba sobre todo en la reducción de emisiones de gases fluorados a través de medidas de contención (control de fugas, certificación y registros). Este reglamento en términos de reducción de emisiones ha sido ineficaz debido a la deficiente aplicación de las medidas de contención recogidas en él. El nuevo reglamento CE 517/2014 tiene como objetivo proteger el medio ambiente mediante la reducción de las emisiones de gases fluorados de efecto invernadero. A partir de 2015, se limita la cantidad total de HFC que se vende en Europa hasta una quinta parte de las emisiones actuales en 2030. La cantidad de HFC´S que se pueden poner en el mercado en 2015 se tomará como base de partida calculada como la media entre 2009 y 2012.
La asignación de cuotas, expresadas en Ton de CO2 equivalente, a cada productor o importador, derivadas de la aplicación del Reglamento Europeo F-gas, provoca un nuevo escenario en cuanto a disponibilidad de gases refrigerantes en el mercado. Esta situación se ve agravada este año, cuando las cuotas de Ton de CO2 equivalente del mercado europeo experimentarán un
nuevo recorte del 37% hasta finales de 2020; un recorte al que hay que añadir un 11% de los gases importados, por lo que la reducción total equivaldrá a un 48%. Este hecho marcará un antes y un después en la disponibilidad y precio de los gases refrigerantes.
Sin sustitutos directos
El gran problema al que se enfrenta la industria de la climatización viene derivado de que no todos los refrigerantes comercializados en la actualidad, a excepción del R-134a (R-407C, R-410A), disponen de un sustituto directo de menor PCA. Además, los usos y aplicaciones de algunas de las nuevas alternativas del grupo L2 (ligeramente inflamables) están limitados a la espera de la aprobación y publicación del nuevo reglamento de seguridad que modifique su manipulación.
Asimismo, y debido a la escasez de Fluorita y problemas medioambientales en China, que es el país líder en la producción de este mineral necesario para la fabricación de los gases fluorados, como el R-125 y R-32 (componentes mayoritarios del R-410A), se está provocando un desajuste entre la oferta y la demanda que encarece el precio de los refrigerantes. Teniendo en España el coste añadido del Impuesto sobre Gases Fluorados de Efecto Invernadero, que acarrea un gran aumento en el coste de refrigerante; un hecho que está generando un incremento del mercado negro, alimentado por importaciones fraudulentas a través de aduanas.
Futuro de los gases refrigerantes en climatización
Como las regulaciones vinculadas a los gases refrigerantes se han vuelto cada vez más estrictas y la conciencia ambiental ha aumentado, constantemente se están buscando mejores gases, con mayor eficiencia y con menores impactos sobre el efecto invernadero. Y aquí entra en juego:
El R-32, que reduce el impacto medioambiental en un 75% en relación a otros gases utilizados anteriormente y resulta mucho más eficiente
(A+++). Se trata de otro HFC, clasificado como ligeramente inflamable (A2L), que ya ha sido utilizado anteriormente como mezcla de otros gases (como el R-410A), pero en este caso no perjudica a la capa de ozono y posee unas excelentes propiedades termodinámicas.
El R-32, además de ser mejor en transmisión térmica y eficiencia energética que el R-410A (el gas refrigerante más usado actualmente), es mucho más ecológico y respetuoso con el medio ambiente, consume menos energía con temperaturas exteriores extremas y, en condiciones normales, tiene una capacidad de refrigeración superior a la del R410A. Es, por lo tanto, un gas más eficiente y sostenible y, además, proporciona un mayor ahorro energético en el ámbito doméstico o industrial.
Las hidro-fluoro-olefinas (HFO) que presentan PCA (Potencial de Calentamiento Atmosférico) de hasta un 99% menor que lo usado hasta ahora. Ofrecen un excelente rendimiento, eficiencia, mantenimiento y proporcionan una vía más “verde” para reducir la huella de carbono. Las nuevas mezclas basadas en HFO cubren refrigeración estacionaria, transporte refrigerado y aire acondicionado. Son la cuarta generación de gases fluorados y presentan una gran alternativa para cumplir con la F-gas.
Dentro de la familia de HFO para climatización nos podemos encontrar:
R-454B es un refrigerante de sustitución de tecnologías R-410A que no daña la capa de ozono, tiene bajo potencial de Calentamiento Global, y es apto para los equipos nuevos. Proporciona el PCA más bajo posible (466) entre todas las soluciones parecidas, con un 78% de reducción en comparación con R-410A. Además de esto, es un equivalente muy cercano a
R-410A y en algunos casos proporciona incluso un rendimiento superior en prestaciones y capacidad. Clasificado como ligeramente inflamable (A2L), R-454B permite cargas de un tamaño mucho mayor que otros refrigerantes inflamables y puede ser usado sin peligro siguiendo códigos y estándares aplicables.
R-452B es un refrigerante de sustitución de tecnologías R-410A clasificado como ligeramente inflamable (A2L), que no daña la capa de ozono, tiene bajo potencial de Calentamiento Global
(676), con un 65% de reducción en comparación con R-410A y es apto para los equipos nuevos. R-452B ofrece un equilibrio óptimo entre rendimiento energético, propiedades de ultrabaja inflamabilidad y rendimiento a temperaturas ambientales altas. Las aplicaciones de este refrigerante son para desplazamiento positivo, aire acondicionado de expansión directa y bombas de calor.
AGRAVANTE AÑADIDO. En España, el coste añadido del Impuesto sobre Gases Fluorados de Efecto Invernadero acarrea un gran aumento en el coste de refrigerante; un hecho que está generando un incremento del mercado negro, alimentado por importaciones
fraudulentas a través de aduanas