CIC Arquitectura y Construcción
DISEÑAR PARA EL BIENESTAR
El bienestar es un estado físico y mental saludables a lo largo del tiempo, en un entorno de apoyo social y material. En opinión de los integrantes del estudio Mendezdelpozo, el bienestar es sistémico y holístico e integra muchas dimensiones, incluyendo las necesidades físicas, cognitivas y psicológicas de las personas.
Plano físico, estar más saludable. Los espacios de trabajo deben dar soporte al movimiento habitual de las personas a lo largo del día y promover las posturas saludables que ayuden a los trabajadores a estar cómodos y con energía. Para ello:
• Han de permitir el movimiento frecuentemente.
• Han de fomentar un rango de posturas.
• Han de fomentar la ergonomía.
Plano cognitivo, pensar mejor. El espacio de trabajo debe permitir estar concentrado y recargar pilas a sus trabajadores a través de espacios donde las personas, tanto a nivel individual como en equipo, puedan pensar con claridad, concentrarse fácilmente, solucionar problemas y generar nuevas ideas. Deben ser, en definitiva, espacios para la creatividad que promuevan:
• Satisfacer la necesidad de concentración y descansar.
• Satisfacer las necesidades de privacidad y soledad.
Plano emocional, sentirse mejor. Las organizaciones deben apoyar la naturaleza social del trabajo creando espacios de trabajo que fomenten el sentido de pertenencia y las conexiones entre las personas y la organización. La conexión entre el cuerpo y la mente de un ser humano es la emoción. El objetivo, por tanto, es:
• Promover espacios diseñados para relacionarse, colaborar y para concentrarse a solas y recuperar energías.
• Promover interacciones sociales.