La venganza de Van Aert
Heusden-Zolder marcó la revancha de Tabor y Wout Van Aert vistió su primer arcoíris tras sobreponerse al enganchón con Mathieu Van der Poel y doblegar a Van der Haar. En féminas sorprendió Thalita de Jong. Felipe Orts, sensacional sexto sub23.
El nuevo campeón mundial, Wout Van Aert, tiene 21 años. Todavía podría correr en sub23, pero ya en 2015 optó por competir con los élite porque la categoría se le quedó pequeña, lo mismo que al holandés Mathieu Van der Poel -21 años cumplidos el 19 de enero-, campeón saliente, pues le derrotó en el mano a mano que ambos sostuvieron en Tabor. En Heusden-Zolder, donde los dos partían como favoritos, el belga se tomó la dulce revancha ante una afición volcada con él. Y lo hizo sobreponiéndose al percance que sufrieron ambos en la quinta vuelta, cuando una maniobra del holandés acabó con su pie atascado en la rueda delantera de su rival. Desengancharse les relegó a la séptima y octava plaza a casi medio minuto de la cabeza, donde Lars Van der Haar decidió no hacer prisioneros y aprovechar las circunstancias. En un visto y no visto dejó de rueda a Pauwels, Nys, David Van der Poel, Sweeck y Meeusen, que se fueron desperdigando. Van Aert, apoyado por un Sweeck que lo dio todo para acercarle, fue remontando y se unió a Pauwels y Nys, que transitaban a 15 segundos del corredor del Giant. Mathieu Van der Poel tardaba más en reaccionar y continuaba octavo a medio minuto. El coraje del campeón de Herentals, que nunca da nada por perdido, salió a relucir una vez más y poco antes de entrar en la última vuelta alcanzó a Van der Haar. También quemaba sus naves Van der Poel, tercero, quien llegó a estar a una docena de segundos antes de reventar.
Pauwels y Nys se iban a jugar el bronce mientras la lucha por el oro alcanzaba niveles indescriptibles. Una vuelta final inolvidable con Van der Haar que por un momento pareció escaparse, pero un titánico último esfuerzo de Wout Van Aert doblegó al holandés, plata a cinco segundos. El bronce, a 35 segundos, fue para Kevin Pauwels. Cuarto a 39ÂÂ, y despidiéndose de una afición que le aplaudió como si hubiese ganado, Sven Nys se quedó sin una medalla postrera. El `caníbal' de Baal pondrá el 5 de marzo el punto final a una carrera de leyenda con 2 títulos mundiales, 9 nacionales de Bélgica, 7 Copas del Mundo, 13 Superprestigios y 163 victorias en sus 20 temporadas en activo. Por parte española, Javier Ruiz de Larrinaga, 27ë a 3Â56ÂÂ, alcanzó su mejor
puesto de siempre e Ismael Esteban, que debutaba en un Mundial élite, acabó 32ë.
LA HORA DE THALITA
En la prueba élite de féminas las opciones estaban más abiertas en ausencia de Marianne Vos y de la defensora del título, Pauline FerrandPrévot. La carrera tuvo muchas alternativas y empezó dominada por la británica Nikki Harris, que como suele realizó una carrera de más a menos. Una vez neutralizada se sucedieron en el liderato la holandesa Sophie de Boer, la belga Sanne Cant -principal favorita y reina de la Copa del Mundo- y la francesa Caroline Mani. Sonaba la campana a falta de una vuelta y a las cuatro citadas se había incorporado, tras una impresionante remontada, Thalita de Jong. La holandesa salió mal y estaba pasando desapercibida en la presente temporada -13ã en la Copa del Mundo-, pero además de llegar a la cabeza demostró que le quedaban fuerzas y se marchó en la parte más dura del circuito para imponerse en solitario. Marcó la única vuelta por debajo de los diez minutos. En la lucha por la plata, Mani superó al sprint a una desconsolada Cant, que un año más no pudo hacer buena su condición de favorita. Aida Nuño fue la mejor española, 17ã a 2Â32ÂÂ, mientras Lucía González concluía 21ã a 3Â11ÂÂ. Las dos completaron su mejor actuación en unos Mundiales. Por primera vez se celebraba un Mundial sub23 de féminas. En medio del diluvio se imponía con claridad la británica Evie Richards, que aventajó en 35ÂÂa la checa
Nikola Noskova y en 47ÂÂa la holandesa Maud Kaptheijns. Muy bien Alicia González, 16ã, que llegó a ser cuarta y estuvo peleando por el top ten hasta que perdió comba tras sufrir un enganchón. Alba Teruel entró 22ã.
SUEÑOS DE JUVENTUD
Si la actuación española fue buena en líneas generales, en los casos de Felipe Orts en sub23 e Iván Feijóo en júniors cabe calificarla de excepcional, especialmente en el caso del alicantino. Se mantuvo toda la carrera entre los diez ciclistas que se jugaron las medallas. Los belgas tomaron el control, primero con Hermans y luego con Soete, primer atacante serio que fue neutralizado por el propio Orts y el holandés Wouters. Las vueltas fueron pasando sin que nadie se destacara hasta que el checo Toupalik apretó en la penúltima vuelta y, para pasmo general, levantaba los brazos en el penúltimo paso por meta. Tras la pifia tuvo arrestos para engancharse a Iserbyt y Hermans, los tres que se repartieron los metales. El sobresfuerzo pasó factura a Toupalik, que no pudo en el sprint con el belga Eli Iserbyt, oro en su primer año como sub23. Iván Feijóo llegó a estar cuarto para terminar octavo a 34 segundos del bronce y a 1Â34ÂÂdel ganador júnior, el holandés Jens Dekker -primo del conocido ex profesional Erik Dekker-, quien se mantuvo casi toda la prueba en solitario y precedió a un dúo de franceses, Crispin y Bonnet.