Madera de campeón
Carpintero de profesión, en 2015 culminó en Puerto Lumbreras (Murcia) uno de sus grandes objetivos, perseguido con ahínco durante años, y logró colgarse una medalla de oro en un Campeonato de España, el de Máster 60.
Cuéntanos cómo aterrizaste en el ciclismo y si habías practicado antes otros deportes.
De joven empecé jugando al fútbol. A los 27 años lo dejé y me compré la primera bicicleta, aunque siempre me llamó la atención el ciclismo. Aterricé en el Club Ciclista Castreño desde los comienzos -fue socio fundador- y allí me inicié en las marchas cicloturistas, compaginándolo con la práctica del ciclocross. Participé en varias pruebas importantes, entre ellas el Ciclocross Internacional de Zarautz y varios campeonatos de España. En uno de ellos, que se celebraba en la localidad de Noja, sufrí una hernia, una lesión grave que me tuvo bastante tiempo recuperándome. Poco a poco comencé de nuevo a montar hasta conseguir un nivel óptimo y empecé a fijarme en las pruebas máster.
Trabajas como carpintero en el ayuntamiento de Castro Urdiales. ¿Cómo es el día a día en tu vida cotidiana y cuántos kilómetros marca tu computador al final de la temporada?
Trabajo en mantenimiento para el ayuntamiento y es bastante sacrificado afrontar una jornada laboral y, de seguido y sin comer, hacer tres horas mínimo de entrenamiento, llegando incluso a las cuatro o cinco horas los fines de semana. Tengo por costumbre levantarme a las 6:30 de la mañana, trabaje o no, y cuando llega el fin de semana antes de salir en bicicleta siempre ando durante una hora. Después de una jornada de bici, como y me echo la siesta. Ya por la tarde doy un paseo, visito a mis nietos y a descansar hasta el día siguiente. Cada año suelo rondar los 20.000 kilómetros más o menos.
¿Qué es lo que más te motiva a la hora de subirte a una bicicleta? ¿Te da tiempo a compaginar las salidas en bici con la familia y los amigos?
La mayor motivación es ver cómo cada día voy progresando y me encuentro mejor. Tengo la virtud de llegar a los objetivos concentrado y en plena forma. Aunque debo reconocer que andar a un nivel alto desgasta mucho y que cuando se acercan las pruebas, las salidas cada vez se hacen más duras. Intento repartir el tiempo entre los amigos -una visita a la tienda de bicis Lastra nunca falla- y la familia, que son quienes me apoyan día a día.
Ya vemos que te tira más la competición que el cicloturismo pausado. ¿Te consideras una persona competitiva?
Cien por cien. Me gusta ganar hasta jugando a las cartas y para ello me preparo concienzudamente de lunes a domingo. No dejo de salir ningún día, esté o no cansado. Es más, cuando me noto así es cuando hago más kilómetros.
¿Sales en bici solo o en compañía?
Normalmente, los días de diario salgo solo porque es complicado que alguien tenga el mismo horario, pero los fines de semana siempre coincidimos un grupo. A veces incluso hacemos entrenamientos conjuntos con los demás compañeros del equipo Spiuk-BH.
¿Cuál es tu mejor virtud encima de la bici?
Donde más cómodo me encuentro, también por mi físico -pesa 60 kg-, es subiendo. Mi punto flaco son sin duda las bajadas; he sufrido alguna caída y eso te pasa factura.
¿Qué es lo mejor y lo peor que has encontrado en este deporte? Alguna anécdota que hayas vivido montando en bicicleta.
Lo más positivo es que cuando estás montando en bicicleta te evades por completo de los problemas y el estrés, la relajación es total. También la gente que conoces en las pruebas, que al final llegan a ser casi amigos. Y lo peor, creo que ahí coincidimos muchos, es el tráfico. El poco respeto que se tiene hacia las personas que vamos en bicicleta y la escasa concienciación al respecto. Como anécdota, no muy agradable, es que una jornada placentera en bicicleta junto con un amigo acabó en el calabozo de la Guardia Civil...
¿Qué opinión tienes de las marchas cicloturistas? ¿Te volveremos a ver en alguna de ellas?
El ambiente es muy bueno, pero sinceramente, con tanta gente en algunas he pasado bastante miedo. En estos momentos hago más carreras que marchas cicloturistas, aunque he completado la Quebrantahuesos con un buen tiempo (6h21’), los Lagos de Covadonga, Arsan en Astillero o la que organizamos aquí, la Castro-Castro, que cada edición va contando con mayor participación y aceptación por todos los cicloturistas. Desde luego que si no estoy en las carreras seguiré participando en marchas, seguramente tomándomelas con tranquilidad y con un nivel más asequible.
¿Recomendarías este deporte a la gente?
Sin lugar a dudas. Un ejercicio como montar en bicicleta es saludable y todo el mundo debería probarlo. Eso sí, siempre sabiendo cuáles son nuestras limitaciones porque luego nos llevamos sustos como los de algún participante por sobrepasar sus límites.
¿Algún proyecto de futuro?
Los más cercanos, para 2016, son disputar las pruebas del calendario máster y sobre todo defender el título de campeón de España. Continuaré montando en bici como te digo, pero en competición no me veo muchos años más. Cada vez me cuesta más seguir esta dinámica de sacrificio y esfuerzos. Por último, quería agradecer a los integrantes de mi familia por apoyarme cuando necesito un extra de motivación.