QUE SE NOTEN ESAS PIERNAS
Habitualmente limitado de medios, Burgos BH se despliega cuando llega la carrera de casa. "¡El Tour de Burgos!", dice uno de sus auxiliares entre risas. Toda la infraestructura de vehículos, técnicos, material y hasta toldos se exhibe en cada salida y meta para demostrar que este equipo, aunque modesto, es capaz. Sus corredores, motivados, responden con actividad: a falta de piernas para disputar las victorias a los World Tour, Pablo Torres o Jesús del Pino se meten en las fugas mientras Igor Merino o Jorge Cubero atacan a contrapié para, al menos, mostrar el maillot en televisión. "Estoy en muy buena forma y no se me ha visto". En la salida de Caleruega, Ibai Salas lamenta su anonimato. Es uno de los mejores ciclistas del equipo, tres años completos ya como profesional, todoterreno ligero que suele lucir en pruebas de un día, y no ha asomado por cabeza de carrera. "Hoy la fuga va a ser muy disputada porque es el último día y encima está en juego la clasificación de la Montaña. Pero la voy a coger". Dicho y hecho: el vizcaíno entra en dos escaramuzas sin éxito y la tercera es la vencida. Lo da todo y logra ser el penúltimo superviviente de la escapada: sólo el poderoso Omar Fraile (Dimension Data) aguanta más que él antes de ser neutralizado por los hombres de la general, que pedalean frenéticos camino de las Lagunas de Neila. "Se han notado mis piernas", afirma satisfecho Salas antes de recoger el premio de la Combatividad.