KLASIKA PRIMAVERA
GORKA IZAGIRRE FLORECE EN AMOREBIETA Tercer triunfo consecutivo de Movistar Team en Amorebieta, esta vez con Gorka Izagirre -segundo en 2014 y 2016-, que al fin consiguió su ansiada txapela. El colombiano Paredes y el portugués Rui Vinhas completaron el p
Gorka Izagirre también gana para Movistar.
Es que ª aunque a algunos que tengo cerca parece que les resulte sencillo ganar, para el resto es muy difícilº. Para los mortales, se refiere Gorka Izagirre. Para los que no son Alejandro Valverde, que tan fácil lo hace todo. Pero para otros, los que forman parte del grueso grupo de seres humanos del pelotón, como Gorka, lo de alzar los brazos está reservado a días selectos y contados. El último hace tres años, en un baño de masas ante sus paisanos en la Klasika de Ordizia, la carrera del pueblo. La que Gorka, de la mano de su hermano pequeño Ion, iba a ver cada
25 de julio con su padre, el ciclocrossista al que todos saludan a cada paso que da. Y desde entonces, desde 2014, sin probar la miel del triunfo. Dos piernas empeñadas en el trabajo, entregadas a los líderes, Nairo y Alejandro. Olvidándose de lo que es eso de ganar, tanto que cuando llega uno explosiona de felicidad como la primavera y sus flores en abril. Como Gorka en la 63ã edición de la Klasika Primavera. ª Que ya era horaº , se repite. Que aunque poco expresivo, la alegría se le puede palpar. ª Con los líderes que hay en Movistar Team no tenemos
muchas oportunidades y estos días debemos aprovecharlosº.
MALAS SENSACIONES
Lo aprovecha Gorka y eso que desde que se despierta, bien de mañana, las piernas gritan de dolor y cansancio. Una semana entera remando para Valverde deja esas consecuencias. Pero hoy no está Alejandro, se lleva su maillot amarillo de la Itzulia de camino a Murcia y a él le florece la oportunidad. Y justo en el momento que llega, el cuerpo no trasmite lo que debe. Porque cuando se forma la fuga en la primera parte de la carrera ª no iba con muy buenas sensacionesº , reconoce Gorka. Fernando Orjuela del Manzana Postobón, Dani López Parada (Burgos-BH), Ángel Rebollido (W52Porto), José Carlos Núñez (Dare-Viator) y Julio Alberto Amores por parte del Inteja se marchan con el beneplácito del pelotón, que quiere una salida lo más tranquila posible. Las piernas aún no se han despertado, es demasiado pronto. Ya llegará la guerra. Cuando se afronta el primero de los tres pasos por Montecalvo, a Gorka Izagirre el cuerpo no le manda señales demasiado halagüeñas. ª No iba a gustoº , confirma. Debe dejarlas madurar, que se despierten y recuerden el golpe de pedal que le ha
llevado a proteger al ganador de la ronda vasca hasta apenas 24 horas antes. Y así, con el discurrir de los kilómetros, ª fui entrando en carreraº , cuenta. Al comenzar la segunda subida a Montecalvo, la cuesta que espera llena de gritos y gente, el del Movistar Team se marcha con otros siete corredores: Gari Bravo (Euskadi-Murias) y su estado de gracia; Salvador Guardiola y el singular Óscar Pujol del Team Ukyo; Nick Schultz del Caja Rural-Seguros RGA; Ibai Salas (Burgos-BH), para quien Amorebieta es su Tour de Francia particular corriendo ante los suyos; Wilmar Paredes y Rui Vinhas. ª Una vez ahí me he encontrado muy bien. La escapada tenía nivel, con casi todos los equipos representadosº , narra Izagirre. Uno de los que no estaban era el Sporting-Tavira portugués del incombustible Rinaldo Nocentini, así que el castigo estaba claro: a tirar del pelotón. Allí, rezagados y expectantes, Víctor de la Parte, con el mismo golpe de pedal de Gorka labrado en la Vuelta al País Vasco, Jesús Herrada y José Joaquín Rojas, al que todos esperaban, se agazapaban tras los lusos por si el grupo de Gorka era neutralizado y debían entrar en acción.
ATAQUE EN DESCENSO
No hizo falta. Aunque no disfrutaron de más de un minuto de ventaja, el corte bueno estaba hecho. ª Llevábamos muy poca diferencia, así que me he lanzado un poco para abajo. Cuando he visto que tenía hueco ya no he mirado hacia atrásº , relata Gorka. Diez segundos. Ocho. Siete. Diez otra vez. Nadie es capaz de seguirle. Izagirre va directo a por la victoria, la tercera consecutiva de Movistar Team en Amorebieta tras las de José Herrada y Visconti, su primera en la carrera vizcaína después de dos segundos puestos. La primera también en tres años de sequía al servicio de los jefes. Le cuesta a Gorka Izagirre ese caminar en solitario porque aflora otra vez el cansancio, como si se hubiese levantado de nuevo y las piernas estuvieran acartonadas. Sufre y se le hace largo el final. ª Creía que no llegabaº. Pero sí, lo logra. En el podio le acompañan el colombiano Wilmar Andrés Paredes (Manzana Postobón) y el luso Rui Vinhas (W52-FC Porto), que en el sprint supera a Salvador Guardiola. Ninguno de ellos puede con Gorka. Hoy es su día. ª Este triunfo me llena de alegríaº. Al fin. ª Ya era hora de ganarº.