El pelotón español gana color
Después de varias temporadas estancado, el pelotón español ha recibido una bocanada de aire fresco y caras nuevas este invierno gracias a los ascensos a la categoría Profesional de Euskadi-Murias y Burgos BH y a la Continental de Fundación Euskadi y Polartec-Kometa, que por cierto se estrenó en esta carrera. Con ellos estaba Faustino Muñoz, mecánico de toda la vida de Alberto Contador, quien en la ronda levantina vio debutar en competición a su marca de bicicletas, Finnale. Las monta el Continental hispanodominicano Inteja, que ha incorporado para esta temporada al irreductible Paco Mancebo, fugado en la etapa inicial. Corren buenos tiempos, en definitiva; y con ellos viene la competitividad. De repente el estatus de Caja Rural-Seguros RGA como segundo mejor equipo del paisaje nacional tras Movistar Team ya no está asegurado. "¡Es que antes éramos los únicos de nuestra categoría!", exclama el director Eugenio Goikoetxea. Ahora están acompañados. Y, aunque tanto el técnico verde como sus homólogos en otros equipos afirmen que van a lo suyo sin fijarse en los demás, los ciclistas consultados sí reconocen que existe cierto -sano- pique. Un buen ejemplo de cuánto color aporta a las carreras este nuevo panorama fue la lucha por la clasificación de la montaña en esta Volta a la Comunitat Valenciana. El primer día tomó el maillot Ibai Salas (Burgos BH); al segundo se lo adjudicó Gari Bravo (Euskadi-Murias), quien lo vistió en la CRE y en la jornada de Cocentaina, en la que Cristian Rodríguez (Caja Rural-RGA) quiso arrebatárselo con una meritoria fuga. Sin embargo, el joven almeriense se encontró en ella con un rival inesperado: el veterano Preben Van Hecke (Sport Vlaanderen), ex campeón de Bélgica, que le ganó todos los sprints que se jugaron mano a mano para llevarse el gato al agua.