Zapatillas fi’zi:k R1 Infinito
Desde que nos las enseñaron durante el transcurso de la última feria Unibike, llevábamos con ganas de probar el nuevo buque insignia de la gama de zapatillas de los italianos y más aún cuando varias semanas después anunciaron que iban a ser el calzado oficial del Movistar Team. Además, con las zapatillas de fi’zi:k se da la curiosidad de que por nuestras manos han pasado todos los modelos que la marca ha lanzado, por lo que hemos podido ir viendo su evolución desde aquellas elitistas zapatillas elaboradas con piel de canguro, cierre micrométrico con leva de carbono y tejido de tela de vela de barco en las tiras de los velcros hasta los funcionales y deportivos modelos de la actualidad. Con esta última versión, fi’zi:k continúa ahondando en esa deportividad con un diseño de líneas limpias que sigue la tendencia de estética actual. Se eligen los ya imprescindibles cierres Boa IP1, que permiten apretar y aflojar de forma micrométrica, además de la liberación total al tirar de él. En ellos que hay que destacar la configuración del tiro de cable del inferior en lo que la marca ha denominado como Volume Control. Partimos de que el forro se estructura en dos mitades sin lengüeta que se cierran una sobre otra. El cable recorre prácticamente toda la mitad inferior abrazando el pie al apretar de forma muy contundente, mientras que el dial superior ciñe la zapatilla al tobillo con solidez, pero sin apretar gracias a un cuello generosamente acolchado. En la base, la ultrarrígida suela de carbono cuenta con siete aberturas, cuatro de entrada y tres de salida, que aportan una excelente ventilación que hace su uso más tolerante. Sobre la bici comentar en primer lugar un dato importante que a nosotros nos ha supuesto no poder disfrutarlas plenamente. El tallaje, que tradicionalmente era amplio -las hemos utilizado siempre una talla menos de la habitual-, se ha adaptado a los estándares, por lo que en esta ocasión el modelo era pequeño para nuestro pie. Si además le sumamos que la horma es tirando a estrecha, nos obliga a repetir el consejo habitual: probadlas con calma en la tienda, preferiblemente por la tarde que los pies están más hinchados tras todo el día activos. Es importante ya que se trata de unas zapatillas orientadas 100% al rendimiento y con un diseño tan ceñido no está de más cerciorarse de que se adaptan a nuestro pie. Las sensaciones que hemos tenido con ellas no difieren mucho de su anterior tope de gama -que aún se mantienen en catálogo con la denominación Aria R3-, mejorando respecto a estas principalmente en la solidez del apriete en el empeine que hace que las sintamos, aunque suene a tópico, como un guante. También hay que destacar la mejora de la ventilación, ya no sólo por la mencionada en la suela, sino que en la zona del forro son mucho más generosas, solventando una de las limitaciones de los modelos con estructura sin lengüeta. La verdad es que, con lo encantados que terminamos con la anterior versión, que todavía sigue siendo uno de nuestros modelos de uso habitual, no esperábamos menos de fi’zi:k y esta nueva versión no hace sino ahondar en las virtudes logradas con unas zapatillas de primerísimo nivel.