Benjamín Prades
La veteranía es un grado y el mayor de la familia Prades, en su t ercera campaña con el Team UKYO japonés, pasó con un sobresaliente nuestro peculiar test.
¿Quién de los dos hermanos picó al otro para hacerse ciclista? Fui yo. Eduard siempre ha ido siguiendo mis pasos, primero con la escalada y después cuando me pasé a la bici. Me costó un mundo convencer a mis padres y a él, nada (risas).
¿ Te ves corriendo de nuevo junto a Eduard? Claro que nos gustaría. Nos compenetramos muy bien, pero pinta difícil.
Lo que más te ha sorprendido de la cultura japonesa. Que al final no seamos tan diferentes como se cree, sobre todo en el sentido del humor. Nos parecemos en muchas cosas.
¿Y del ciclismo japonés? La evolución que han tenido, con un cambio muy brusco en los últimos años. Los equipos están más organizados y hay mucho más nivel.
Tres palabras para definirte como ciclista y otras tres como persona. Como ciclista: inteligente, con visión y demasiado conservador. Y como persona diría alegre, despistado y un poco cabezón.
¿Ves a los políticos comprometidos con #PorUnaLeyJusta o es sólo de boquilla? No les veo comprometidos con nada que no sean sus propios intereses.
¿Ligón o timidillo? Ni lo uno ni lo otro. Ligón no, pero me gusta coquetear.
¿Qué te hubiera gustado ser de no haber optado por el ciclismo? Bombero. Incluso empecé a estudiar la oposición, aunque no la terminé.
El titular que te gustaría leer en la revista contigo como protagonista. Benjamín Prades ganael Campeonatodel Mundo.
Promociona tu pueblo: el que visite Alcanar no debe dejar de... Probar sus naranjas y pasear por la zona de playa, de las más bonitas y menos masificadas.
Confiésanos una manía incurable para acabar. Cinco minutos antes de que salga una carrera tengo que ir al baño; siempre.