El público español y las clásicas

Como todos sabemos, los aficionados españoles al ciclismo son muy de grandes vueltas y, dentro de estas, sienten predilección por las etapas de montaña. ¿Pero qué pasa con las clásicas? Sucede que los lugares donde se celebran estas carreras y los grandes dominadores de las mismas no suelen ser españoles, excepto en el caso de las clásicas de las Ardenas con Alejandro Valverde. Pero si te gusta el ciclismo y quieres ver espectáculo, deberías mirar las grandes clásicas de primavera, ya que tienen recorridos especiales. Así, la París-Roubaix con 29 tramos de pavés; la LiejaBastoña-Lieja con 11 cotas; la Milán-San Remo y sus 291 km; o la Strade Bianche, donde pasan por caminos de tierra o sterrato. También cuentan con un gran ambiente como en el caso del Tour de Flandes, donde se citan hasta cuatro millones de personas animando a los ciclistas. Increíble, ¿no? Otra razón es que pasan por lugares emblemáticos dentro del ciclismo, como el Muro de Huy en la Flecha Valona, y una más es que los corredores van a por todas, no se guardan ni un gramo de fuerza, ya que no piensan en recuperar para la etapa del día siguiente. Con esto no quiero decir que las clásicas sean mejores que las grandes vueltas, sólo intento incentivar la afición a las clásicas dentro de España, sobre todo porque Alejandro Valverde es el rey de las Ardenas y disponemos de un futuro ganador de clásicas del máximo nivel como es Iván García Cortina.