El rey de Innsbruck
Con el riesgo implícito que con lleva mezclarle con campeones consolidados de la talla de Alejandro Valverde o Anna Van derBregg en, no estaríamos muy desencaminados otorgando el título oficio so de mejor corredor de este último Mundial a Remco Evenepoel. El belga, juvenil de segundo año y ya para el próximo profesional con la estructura del actual QuickStep Floors, asombró al mundo con sus dos títulos logrado sen suelo austriaco. En la crono estableció un récord de diferencia respecto al segundo y dos días después, en la ruta, se exhibió eliminando a ritmo a todos sus rivales tras recuperar dos minutos perdidos en una caída. Se agotaron esos días los elogios y las comparaciones con otros campeones para este ciclista de S chepdaal, hijo de un efímero profesional de inicios de la década de los noventa y al que muchos ya han querido imponer el peligroso estigma de nuevo Eddy Merckx, algo complicado de sobrellevar para toda promesa en ese país. TeamSky llamó a su puerta el pasado verano y adelantó su previsible salto a la máxima categoría para 2020. Con dieciocho años debutará en lo más alto a la imagen de F ilippo Pozzato y Arkaitz Durán, también juveniles estrella que aceleraron con diferente fortuna su llegada al profesionalismo. Pero la magia deportiva de E venepoel no reside sólo en su potencial ola factura conque llegan sus triunfos, casi siempre escapado precediendo a sus perseguidores con amplísimas diferencias. Más allá está la historia de un atleta y estudiante de Psicología que en meses ha asimilado el paso del fútbol al ciclismo con un éxito sin precedentes. Integrante desde los cinco años de las categorías inferiores de destacados equipos como Anderlecht, PSV o KV Malinas, vería cómo su nivel y motivación descendían hasta el punto de hacerle abandonar el popular deporte del balón y buscar lejos de él nuevas motivaciones. En abril del año pasado deb utaba en una carrera ciclista y a los dos meses conseguía la primera de sus siete victorias de 2017 -meses después una de ellas sería la etapa reina de la Bizk aiko Itzulia-. La convocatoria para el C ampeonato del Mundo de B ergen iba a culminar su llegada a es te deporte, pero varias caídas le apartaron de acabar la prueba y culminar este dulce arranque. Esta temporada la espir al ganadora se ha acelerado exponencialmente desde febrero, totalizando otras veinticinco dianas. Además del doblete mundialista se ha anotado vueltas como la Carrera de la Paz o el Giro de la Lunigiana y numerosas pruebas de un día, en tre ellas el Campeonato de Bélgica y el de Europa. "Puse mi ritmo y la ventaja crecía y crecía; honestamente no sé explicarlo, es una locura". Así resumía su título continental tras una fuga de cien kilómetros - la prueba constaba de 118 km- y casi diez minutos sobre el segundo. Quizá en esa superioridad resida el principal problema de una figura demasiado perfecta, algo que estrellas como Tom Boonen ya han sabido ver. "No ha necesitado de táctica alguna siendo tan super ior; hasta ahora es como si no hubiese c orrido nada". Pese a los tr iunfos y parabienes de los últimos meses, parece claro que al bueno de Remco le queda t odavía muchísimo por aprender en el ciclismo, y deberá ser desde ya mismo.