Ciclismo a Fondo

LOOK 795 BLADE RS

Look se apunta a la tendencia de las bicis aerodinámi­cas con frenos de disco, pero sin descuidar su tradiciona­l polivalenc­ia en una Look 795 Blade RS que presume de ser una de las bicicletas más cómodas de su segmento.

- Desde Cannes (Francia) Joaquín Calderón Fotos Damien Rigondeaud

Polivalenc­ia, aerodinámi­ca... y discos.

En la batalla por conseguir la bici de ruta más aerodinámi­ca, las gamas en las que más bicis se estrenan en 2019, Look ha apostado por una aproximaci­ón diferente, en la que ha colocado en el mismo nivel las cualidades contra el viento y el comportami­ento general en marcha. Por eso, la parte más importante del cuadro de su nueva 795 Blade RS, en el que se emplean 506 piezas diferentes y cuatro tipos de carbono -32% de alto módulo, 54% de módulo intermedio,

8% de alta resistenci­a y 6% otras fibras-, es el triángulo trasero, bautizado como 3S y que combina resistenci­a a la torsión -rigidez lateral- y flexión vertical. Consiste en que los tirantes dibujan una especie de arco en su forma sin tubo que los une, ya que en la versión de frenos a la llanta se ha desarrolla­do una prolongaci­ón desde la tija para prescindir de él. Según la marca, gracias a esta forma se consigue un 20% más de flexión respecto a las pruebas realizadas con la unión. Además, en esta parte se modifica la orientació­n y el tipo de carbono de los paneles para alcanzar esa comodidad, algo que Look defiende que sólo puede conseguir gracias a que controla al detalle el proceso de producción de cada cuadro en su fábrica de Túnez, de la que salen 15.000 cuadros anuales.

ESTANDARIZ­ACIÓN

Los tubos de la versión 795 Light RS se diseñaron siguiendo las recomendac­iones NACA, por lo que su forma es afilada. Ahora, Look apuesta por seguir las formas NACA, pero con la parte superior cortada para mejorar tanto la aerodinámi­ca lateral como la frontal y suavizar la transición hacia los bidones en los tubos vertical y diagonal. Según la marca, en los test que ha realizado en el túnel de viento con cinco bicis diferentes (795 Light RS, 785 RS disco y frenos a la llanta y ambas versiones de la 795 Blade RS), la nueva con frenos a la llanta ahorra 17 vatios rodando a 45 km/h respecto a las dos versiones de la ligera 785 RS y 2 W respecto a la 795 Light RS, cuyos datos son iguales

que los de la 795 Blade RS para discos. Como novedad, Look ha prescindid­o de su exclusivo sistema Zed en las bielas y ha desarrolla­do junto a Token un pedalier Press-Fit BB386 de aluminio. La versión para frenos a la llanta, que declara un peso de 6,9 kg en su versión más avanzada, admite neumáticos de hasta 28 mm, mientras que el modelo con discos puede utilizarse con cubiertas de hasta 30. Look asegura que sigue las recomendac­iones de Shimano, por lo que el disco delantero es de 160 mm y el trasero de 140 mm. Todos los modelos, excepto los dos montajes superiores de frenos a la llanta con las nuevas Corima Black 47 WS1, equiparán de serie neumáticos tubeless, un punto a favor que redundará en mejorar la comodidad de una bici que, como es habitual en Look, se aleja de los convencion­alismos.

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