Chupe sigue creciendo

Si hay un ciclista con progresión en el pelotón español, ese es Juan Antonio LópezCózar. Chupe estrenaba por carreteras andaluzas el maillot del Euskadi-Murias y lo hizo a lo grande. El de Loja se metió en la fuga de siete corredores y mostró su garra peleona desde los primeros compases de la prueba. "Esta carrera es siempre muy complicada porque se suele liar con el aire. Teníamos la baza de Enrique Sanz para el sprint, pero también debíamos dar presencia al equipo el resto del día", explicaba el granadino. Él fue el hombre destinado a meterse en la escapada y pasear el colorido verde del Murias en el grupo cabecero. "Quería estar delante y lo he logrado. Los primeros cien kilómetros pegaba mucho aire de cara y he ido guardando un poco". Pensaba en que "llevaba fuerzas para aguantar en el final, cuando viniesen los gallos por detrás, y he resistido como he podido". Una vez cazados, contaba Chupe, "me he comido cada latigazo... Los Mitchelton saben manejarse muy bien en este tipo de finales y a los últimos kilómetros he llegado muy justo", lamentaba. Sin embargo, se amarró al pelotón y consiguió terminar con el primer grupo, el que se jugó el sprint del que Pascal Ackermann salió victorioso. 18º puesto y mejor andaluz. "Por eso estoy contento, desde el kilómetro 10 he ido escapado, gastando mucho, y aun así he entrado en el grupo delantero. Me da pena haber acabado con pocas fuerzas para luchar por un puesto mejor, pero estoy satisfecho".