SPECIALIZED ROUBAIX
Joaquín Calderón acudió a su presentación sobre los adoquines.
El lanzamiento hace tres años de la Specialized Roubaix con su sistema Future Shock en el tubo de la horquilla significó una importante novedad en el mercado. No tanto por el hecho de que Specialized integrase un sistema de absorción en una bici gran fondo, pero sí supuso un cambio de orientación dentro de una plataforma que, desde su introducción en la gama de la marca de Morgan Hill en 2004, se había caracterizado por haberse desarrollado con el doble objetivo de que a los profesionales les sirviese para la clásica de la que toma el nombre y a los cicloturistas les resultase una opción un poco más cómoda a la Tarmac, pero sin renunciar a unas notables capacidades deportivas. Seis triunfos en el velódromo más famoso del mundo, el último conseguido con el anterior cuadro -aunque con un Future Shock modificado con regulación, similar al nuevo- la avalaban hasta ahora. La séptima victoria con Gilbert -más el podio de Lampaert y otros tres puestos de honor entre los diez primeros- no ha podido ser mejor estreno para la cuarta generación.
MÁS DEPORTIVA
Con la nueva Roubaix, Specialized vuelve al camino de una gran fondo con orientación deportiva con la introducción de dos novedades fundamentales. Por un lado, un sistema Future Shock 2.0 con baño hidráulico y regulable en los modelos más avanzados S-Works, Pro y Expert y un Future Shock 1.5 con un funcionamiento más progresivo en los modelos Comp y Sport, y, por otro, un nuevo cuadro más ligero y aerodinámico con un diseño que sigue
las líneas maestras del Venge y la Tarmac. Specialized defiende que su apuesta es suspender al ciclista, no a la bicicleta introduciendo elementos en ella. Por eso incide en que sitúa el sistema encima de la potencia para que la bici no pierda eficiencia y que el ciclista mantenga las sensaciones habituales de conducción. El nuevo Future Shock 2.0 mantiene el recorrido de 20 mm de la generación anterior de la Roubaix y funciona exactamente igual cuando el dial de regulación está completamente abierto; sin embargo, el baño hidráulico permite regularlo con un dial sobre la potencia en diferentes posiciones para ajustar la compresión, lo que reduce su movimiento, sobre todo a baja velocidad, pero se mantiene absorbiendo los baches más grandes o zonas muy irregulares. Lo hemos probado tanto en el pavés de Flandes como en el de Roubaix y sigue absorbiendo mucho; sólo que ahora puedes cerrarlo cuando ruedas en asfalto y la dirección se nota más firme. El Future Shock 1.5 de los modelos Comp y Sport es diferente, ya que no
tiene baño hidráulico, sino tres muelles, el principal, situado en la parte inferior, más progresivo; el del medio, que controla el rebote; y el superior, que es lineal y apoya el trabajo del inferior en la absorción de los grandes baches, y un bumper inferior -un sistema para controlar el rebote-. La marca recomienda utilizarlo con este diseño, aunque está previsto que exista un muelle más lineal si la utilización es fundamentalmente en rutas adoquinadas. En ambos casos se pueden instalar espaciadores hasta una altura de 30 mm y conseguir aumentar el stack, con un manillar Hover de doble altura, 45 mm más. En esa misma línea de suspender al ciclista, la nueva Roubaix cambia completamente la tija de sillín y su sistema de apriete, manteniendo la comodidad, pero mejorando la estética y la aerodinámica. Mientras que antes era redonda, de 27.2 mm y se utilizaba una cabeza CG-R para permitir una flexión de 20 mm; para su nueva gran fondo Specialized ha desarrollado la tija Pavé, con una forma en D como la de la Tarmac y que mantiene los 20 mm de flexión para absorber las vibraciones. La anterior Roubaix confiaba el apriete en un collar con dos tornillos en el lado opuesto al que se unían los tirantes en el tubo del sillín; ahora se ha desarrollado una cuña que ejerce la presión en la misma posición -a 65 mm del extremo del tubo del sillín- para seguir dejando libertad de movimiento a la tija.
UN CUADRO PARA TODOS
Además del cambio de posición del apriete de la tija, el cuadro ha sido totalmente rediseñado, incorporando la centralita de los grupos electrónicos en el tubo diagonal, y ahora se asemeja por sus líneas al Tarmac y al Venge Disc. De hecho, sus pruebas en el túnel de viento de Morgan Hill han arrojado que la Roubaix no sólo es más aerodinámica
que la anterior versión -entre 22 y 24 segundos en 40 km-, sino que también es más rápida que la Tarmac -entre 8 y 10 segundos en la misma distancia-. El mayor esfuerzo se ha realizado en el apartado del peso para conseguir que el cuadro sea más liviano que la Venge, ya que declara 900 gramos en versión S-Works pintado de negro en talla 56. Entre el cuadro tope de gama S-Works con carbono, construido con FACT 11r, y los cuadros 10r de las demás versiones existe una diferencia de 115 g. Otra novedad importante es que todos los pedalieres son de rosca -algo que seguramente hará felices a los mecánicos-, mientras que el paso de rueda crece hasta los 33 mm -antes el límite era de 32 mm-. Para los profesionales, o para aquellos que busquen las sensaciones de manejo de una bici deportiva, pero muy cómoda, la marca ha desarrollado la geometría Team, que reduce la pipa de dirección en 35 mm y aumenta el reach -la distancia efectiva hasta el manillar-. Estará disponible sólo en versión S-Works, con un espectacular diseño de camuflaje y en tres tallas: 53, que tiene el mismo reach y stack que una Tarmac en talla 54; 57, igual que una talla 56 de la Tarmac; y 59, que es un poco más grande que la Tarmac en talla 58. Es el mismo cuadro y la decoración que usaron los ciclistas de Bora-Hansgrohe y Deceuninck; a excepción de Peter Sagan, que empleó un diseño de su colección conmemorando su palmarés. Los modelos con la denominada Geometría Clásica -desde la 44 a la 61- están disponibles en siete tallas; también llegará al mercado una versión de la Comp en 64. Como es habitual, todos los cuadros se fabrican siguiendo la tecnología RiderFirst Engineered para adecuar su comportamiento al tamaño. Otra novedad es que la Roubaix se ha desarrollado tanto para hombre como para mujer, lo que en la práctica elimina la plataforma Ruby del catálogo de la marca. Según Todd Carver, responsable del departamento de rendimiento humano y fundador de Retül: “Hemos aprendido que hay más diferencias entre dos hombres que entre una mujer y un hombre”. La compra de esta plataforma de análisis permitió a Specialized elaborar una base de datos de ciclistas de géneros diferentes, que les llevó a tomar la determinación, algo que ya hicieron en la última renovación de la Tarmac, de apostar por la misma geometría, sólo adaptando los puntos de contacto.