Grossschartner triunfó en Turquía
El austriaco del Bora se apuntó su primera ronda por etapas en una Vuelta a Turquía en la que brilló el niño Remco Evenepoel y destacó el madrileño Gonzalo Serrano (Caja Rural-Seguros RGA), 8º.
Buscaba la ronda turca relevo para Edu Prades, su último conquistador. El catalán, entonces en el Euskadi-Murias, fue en 2018 el mejor de una prueba que para 2019 diseñó un recorrido algo más tranquilo, con, sobre el papel, sólo una etapa marcada en rojo para los que quisieran sumarse a la pelea por el trono del español. La penúltima, la 5ª, con la larga subida a Kartepe -16 km que quedaron reducidos a 12 por el temporal-. Y en ella se decidió la carrera gracias a un inspirado Felix Grossschartner (Bora-Hansgrohe). Con 25 años, el ex del CCC Sprandi ganó la jornada reina por delante del italiano Valerio Conti (UAE) y del eritreo Merhawi Kudus (Astana), quienes fueron incapaces de contrarrestar la inteligente subida de Grossschartner. El austriaco reguló fuerzas ante los intentos de Conti, el primero en probar, y de Kudus, quien parecía que conseguiría el triunfo hasta que a falta de 300 metros fue sentenciado por el del Bora. El africano incluso fue adelantando por Conti. En cuarto lugar entró Remco Evenepoel (Deceuninck-QuickStep), mismo puesto que ocuparía finalmente en la general, que volvió a dar muestras de su descaro y llegó a rodar destacado.
TERRITORIO BENNETT
Con la lucha por el podio acotada a la mencionada etapa, el resto fue un paraíso para los velocistas. En especial, el de Sam Bennett, compañero de Grossschartner en Bora. El rápido irlandés aterrizó en Turquía con confianza -había ganado etapas en San Juan, UAE Tour y París-Nizay quiso demostrarlo desde la primera etapa, en la que Álvaro Robredo (Burgos-BH) se filtró en la escapada. "Me gusta este país y creo que el país también me quiere", dijo Bennett a los pocos minutos de levantar los brazos en el parcial inaugural de la 55ª edición de una cita que comenzó en Estambul para acabar allí tras seis días de ciclismo por las estribaciones del mar de Mármara, que volvió a ver sonreír en la segunda jornada a Bennett, quien ya suma nueve dianas en Turquía desde 2017. No muy lejos acabó Gonzalo Serrano, quien dio presencia al Caja Rural-Seguros RGA con su cuarta posición -fue octavo en la clasificación final-. Aunque no suele haber dos sin tres, a Bennett le falló el refrán. En la tercera firmó la segunda plaza por delante del reaparecido Cavendish (Dimension Data) y únicamente por detrás del neerlandés Fabio Jakobsen (Deceuninck). Entre los seis aventureros del día, Urko Berrade (EuskadiMurias). Un peldaño más abajo acabó Bennett en la cuarta, tercero ante el empuje del pequeño Caleb Ewan (Lotto-Soudal) y del gaditano Juanjo Lobato (Nippo), primero y segundo en una jornada en la que Ander Barrenetxea (Murias), uno de los dos más fuertes de la fuga, mantuvo la emoción hasta la pancarta de 10 km para meta. "Ha sido un final durísimo", apuntó Ewan, que aseguró que nunca había tenido que vaciarse tanto para alcanzar una victoria. Sam Bennett continuaba al frente de una general que en la mencionada quinta etapa cambió de escenario. Las llegadas masivas dejaban paso a la montaña, que eligió a Grossschartner como rey de una Vuelta a Turquía que en la sexta y última vio cómo Caleb Ewan cosechaba su segundo éxito tras precipitarse Bennett al lanzar la intrincada volata de Estambul.