Candidato sin estrella
En su tradicional calificación de los favoritos para el Tour de Francia en la previa, el diario L’Équipe dejó en blanco la casilla de 5 estrellas -suponemos que como deferencia a Froomey situó al tándem del Team Ineos, Thomas y Bernal, como principales aspirantes con 4. A continuación, Fuglsang con 3; Bardet y Pinot con 2; y Nibali, Quintana, Adam Yates, Urán y Kruijswijk con 1. Ni rastro de Julian Alaphilippe, quinto a la postre, ni de Emanuel Buchmann, que 22 días después llegaba a París en cuarta posición y a escasos 25’’ del podio que cerraba el pelirrojo del Jumbo-Visma. El pronóstico del prestigioso rotativo galo no era un disparate. Los precedentes de este alemán de 26 años en la Grande Boucle -83º en 2015, 21º en 2016 y 15º en 2017- no indicaban un salto de calidad tan notable. La campaña pasada apostó por La Vuelta y después de un inicio esperanzador se vino abajo en la última parte, concluyendo en una discreta 12ª plaza. Sin embargo, que Buchmann era un corredor más decidido en 2019 se vio desde la Challenge de Mallorca, donde estrenó su cuenta de la temporada con un contundente ataque. Dos podios en rondas World Tour, País Vasco -donde regaló una preciosa cabalgada hacia Arrate saldada con victoria de etapa y un liderato que cedería al día siguiente- y Critérium du Dauphiné, eran indicios reveladores de su potencial. Su regularidad en el Tour 2019 ha sido inmaculada e incluso salvó con nota -15º- la crono de Pau. Bien arropado por Bora-Hansgrohe, en especial por un espléndido Gregor Mühlberger, sus mejores puestos fueron sendos cuartos en las dos grandes jornadas pirenaicas, Tourmalet y Prat d’Albis, donde curiosamente en ambas ocasiones llegó con la única compañía de Bernal, futuro ganador en París. En los Alpes se le acusó de falta de arrojo teniendo el podio tan cerca, pero Emu se mostraba satisfecho en la cima de Val Thorens tras confirmarse su cuarta plaza. "Contaba con margen de sobra respecto a los que me seguían en la general como para concentrarme en subir posiciones, pero hoy no tenía las mejores piernas y ni lo he llegado a intentar. Me siento superfeliz con el cuarto lugar, un gran logro comparado con mi objetivo del top10. No he estado lejos del podio, pero Thomas y Kruijswijk simplemente han sido más fuertes y este es el mejor resultado al que podía aspirar. Me quedan años por delante para continuar peleando". Su magnífica actuación provoca una situación inédita en el equipo BoraHansgrohe, que deberá conjugar sus aspiraciones con las de Peter Sagan en una alineación con sólo ocho integrantes.