EL MATERIAL DEL PELOTÓN
El inicio de la temporada es el momento de descubrir las novedades de los equipos y las tendencias del material en la competición, donde algunos conjuntos escapan de la presión de los frenos de disco.
Repasamos las novedades técnicas en la temporada que empieza.
La utilización de los frenos de disco en competición ha sido una constante fuente de polémica entre los aficionados interesados por el material ciclista desde que comenzaron a aparecer en las carreras -Markel Irizar, en La Vuelta de 2015, fue el primero que los utilizó-. Qué lejano queda aquel enero de 2017 en el que Tom Boonen celebró ser el primer ciclista en conseguir una victoria con este tipo de frenos en el Tour de San Juan -declaró que se sentía “orgulloso de hacer historia”-… y, aunque han proliferado hasta ser mayoritarios, aún no se han impuesto definitivamente. Mads Pedersen se convirtió en Yorkshire en el primer ciclista en ganar un Mundial con discos, y ya está luciendo su Trek Madone personalizada con los colores del arcoíris con ellos, pero de momento ningún ciclista se ha impuesto en la general de una gran vuelta con discos. Y existen grandes posibilidades de que esta temporada siga siendo así, ya que los tres últimos ganadores -Carapaz, Bernal y Roglic- no parece que vayan a utilizarlos. De los vencedores de grandes desde 2017, sólo Simon Yates, primero en la ronda española en 2018, afrontará la temporada con ellos porque la nueva Addict RC, la bici que suele utilizar en competición, ya no está disponible con frenos a la llanta. Nibali y Nairo Quintana, vencedores del Giro de Italia y La Vuelta en 2016, sí los emplearán. La ligereza sigue siendo el factor determinante en el material que escogen los ciclistas que se juegan el triunfo en las rondas por etapas. Y si pueden elegir, parece demostrado que prefieren seguir apostando por los frenos a la llanta. Así, casi con toda seguridad veremos a los ciclistas del Ineos y Jumbo-Visma, con Pinarello y Bianchi respectivamente, utilizar frenos a la llanta en el Tour de Francia, al igual que Romain Bardet, que el año pasado consiguió que Eddy Merckx diseñara por la vía rápida la Stockeu69 -utilizando la base de la Ridley Helium SLX, aprovechando
que ambas marcas son de la misma compañía-. Ineos y Jumbo-Visma comparten que su fuente de ingresos no depende en tanta medida como en otros equipos de sus proveedores de material. La mayoría de las bicis que se estrenan para la temporada 2020 ya no están disponibles para frenos tradicionales. Entre los equipos del World Tour, eso les ocurre al Astana con las Wilier 0 SLR; al EF Pro Cycling con las Cannondale SuperSix y la SystemSix; al citado Mitchelton-Scott de Simon Yates; y al Cofidis con la De Rosa Merak -aunque Viviani está usando la Pininfarina
SK-. Una situación diferente viven equipos que montan bicis que sí están disponibles para frenos a la llanta, pero que apuestan, por decisión técnica o por intereses comerciales de las marcas que les patrocinan, por utilizar este tipo de frenos. Son la mayoría, entre ellos el Trek-Segafredo de Nibali, el BahrainMcLaren de Mikel Landa, el NTT Pro Cycling o el Deceuninck-QuickStep y el Bora-Hansgrohe, equipos que deberían, siguiendo la lógica de renovación de cuadros cada tres años, estrenar bicis escaladoras este año: Trek Émonda, Merida Scultura, BMC Teammachine SLR y Specialized Tarmac, respectivamente. En la misma situación se encuentran el Movistar, el Arkéa y el Alpecin-Fenix, aunque parece que Canyon apostará, antes de por cambiar la Ultimate, por lanzar la tercera generación de su
Aeroad, con la que ya corrió Mathieu
Van der Poel la Primus Classic. Aunque disponen de modelos de discos, siguen usando zapatas en sus bicis más ligeras los ciclistas del Sunweb -la Cervélo R5 también está en el ciclo de los tres añosy los del CCC, aunque Giant ya prepara una renovación de su TCR, con la que Greg Van Avermaet corrió el Mundial y ha estado entrenando con ella en las concentraciones de Denia y Tenerife. El belga ha utilizado una versión con discos y lo más probable, si los taiwaneses
siguen la línea de su competencia, es que la nueva bici se presente a finales de primavera o a comienzos del verano sólo con este sistema. Veremos entonces si los ciclistas del equipo polaco podrán elegir o tendrán que renunciar a la ligereza de la actual TCR. Los que parecen que tendrán una bici con zapatas toda la temporada serán Tadej Pogacar y sus compañeros del UAE, ya que Colnago lanzó el año pasado su V3Rs incluyendo una versión con frenos tradicionales.
POCOS CAMBIOS
En la máxima categoría no ha habido grandes cambios en las marcas de bicis. Respecto a los equipos del año pasado, sólo Astana ha sustituido Argon 18 por Wilier, mientras que De Rosa entra con el ascenso de Cofidis, que ha cambiado Kuota después de dos años -en 2017 usó Orbea-, y regresa Factor después de un año de ausencia junto al Israel Start-Up Nation.
El equipo de Cédric Vasseur mantiene su relación con Campagnolo, por lo que, aunque ha perdido a Movistar, el fabricante italiano de grupos sigue contando con tres equipos en la primera división: Lotto-Soudal, UAE Team Emirates y el propio Cofidis. El patrocino de Movistar permite a SRAM mantener dos equipos, ya que el Israel -que compró la licencia del Katusha Alpecin- montará Shimano. Así, sólo 5 de los 19 equipos del World Tour utilizarán grupos con 12 coronas, a la espera de que Shimano mueva ficha con la renovación de su grupo tope de gama, el Shimano DuraAce, un lanzamiento del que se escuchan rumores, pero del que todavía no se ha filtrado ninguna imagen.
Los más frikis del material quizá observaron el año pasado que los ciclistas del Trek-Segafredo utilizaron en el Tour de Francia platos diferentes a los del grupo Red eTap AXS, que en principio sólo están disponibles con 50 dientes en su opción más grande.
Las peticiones de los ciclistas del conjunto estadounidense han tenido efecto, ya que Richie Porte empleó en el Tour Down Under unas bielas con los platos de montaje directo del AXS con dentados 54/41. El motivo probablemente sea no utilizar la corona de 10 dientes para buscar menos fricción en la cadena, logrando un giro más abierto. Precisamente, en el pelotón están proliferando sistemas para reducir el rozamiento, como las roldanas Ceramic Speed que utilizan Israel Cycling Academy y Wilier, ambos con acuerdo de colaboración. Veremos si Romain Bardet, que las usó en el Tour de 2019, sigue o no montándolas este año.
Los elementos que se han convertido en omnipresentes son los potenciómetros, donde Shimano ha ganado la partida esta temporada. Todos los equipos que utilizan sus grupos montan su medidor en las bielas, excepto el Israel Start-Up Nation -4iiii Precision Pro, que pierde al Bora después de 3 años-; Education First -usa Power2Max, que pierde a Movistar-; y Ag2r y NTT Pro Cycling, que apuestan por la marca española Rotor. Lotto-Soudal y Cofidis optan por SRM, que deja de proveer a Bahrain, mientras que UAE Team, el otro equipo de Campagnolo, usa Stages. Movistar Team y Trek-Segafredo utilizan el potenciómetro Quarq integrado en las bielas del SRAM Red eTap AXS.
Más variedad de marcas hay en cuanto a ruedas, aunque tampoco existen grandes cambios respecto a la temporada anterior. Los equipos de Campagnolo utilizan sus ruedas, excepto Cofidis, que opta por Fulcrum. Bahrain ha cambiado esta marca italiana por otra, ya que en 2020 usa Vision, al igual que EF.
Astana sigue confiando en Corima, una relación que se extiende desde 2011, Ag2r en Mavic y NTT Pro Cycling en ENVE. Otros conjuntos apuestan por las ruedas relacionadas con sus marcas de bici, como Trek-Segafredo con Bontrager; Bora-Hansgrohe y Deceuninck-QuickStep con Roval; o CCC, que luce las CADEX que Giant lanzó en el último Tour de Francia. GroupamaFDJ, Jumbo-Visma, Mitchelton-Scott y Team Sunweb siguen con Shimano. La incógnita es Ineos, que en principio utilizará Shimano, pero que en el Tour de Francia de 2019 empleó Lightweight. Además, algunos de sus ciclistas -Ganna, Castroviejo, Van Baarle y Dunbaroptaron por unas ruedas Princeton, en vez de las PRO que suelen usar, en el Mundial de contrarreloj de Yorkshire. Ganancias, quizá, no tan marginales.