MIKEL LANDA
Es como una sensación de ahora o nunca, de que por fin ha llegado el momento. Todo está predispuesto para que, de una vez por todas, Mikel Landa pueda desatar la rabia y la calidad que tiene dentro, dar rienda suelta a su talento para llegar tan alto como
El vasco, que ahora lidera el Bahrain-McLaren, charló con Ainara Hernando.
Son apenas cuatro días de concentración los que el BahrainMcLaren lleva a cabo en Croacia, su punto de partida para la temporada
2020. Pero son suficientes para ver, oír y respirar a otro Mikel Landa. El que por fin se encuentra ante la oportunidad que tanto se ha ganado. “Esto es lo que estaba buscando y no me voy a asustar ahora”, dice. Aunque no niega que en ocasiones le ha faltado ambición. “Quizás a veces me he conformado”. Ahora eso ya no vale. Ahora hay que “correr para ganar”, sentencia, en este equipo que, con la entrada de McLaren introduce toda la tecnología a disposición de su pasión. Y él, de eso, tiene de sobra.
CORRER PARA GANAR
¿Este será el equipo con el que Mikel Landa ganará una grande?
Pues no lo sé, ¡el año que viene te contesto! (ríe) Lo vamos a intentar, el equipo está para eso y tiene las ideas claras. Quieren correr para ganar. Luego ya veremos si se consigue o no, pero esa es la idea. ¿Y las tuyas? ¿Cuáles son tus ideas?
Esas. Disputar una grande a tope otra vez, con un equipo que me ayude y a ver hasta dónde llegamos. ¿Qué cambia?
Que estoy muy motivado. He encontrado un equipo con las ideas muy claras y que tiene un camino muy marcado. Creo que estoy ante, no sé si la oportunidad de mi vida, pero sí ante una gran oportunidad. Ya tengo bastante experiencia, de todos los sitios en los que he estado y las cosas que me han sucedido. Me siento preparado. ¿Te hace temblar por dentro, pensar que ahora sí es de verdad, que ha llegado el momento?
No, no. Si lo estaba deseando, lo estaba buscando. No me voy a asustar ahora. ¿Tienes el ansia de que llegue el momento?
Voy a ir poco a poco, con calma. Está claro que el Tour es mi objetivo y el del equipo también, pero no hay que centrarse sólo en el Tour. La temporada es muy amplia, hay muchas carreras importantes y creo que hay que ir día a día. Conseguir una victoria antes me gustaría mucho, para relajarme yo mismo y el ambiente y poder disfrutar de buenos momentos junto al equipo antes de que sea el turno del gran objetivo. Cuando llegue el Tour de Francia ya vendrá esa tensión extra. ¿Pero te gusta esa tensión?
Sí, transformada en adrenalina, sí. Es un reto y disponer de un equipo así, como este, detrás me tranquiliza mucho. Vamos, que se lleva bien. ¿Dónde te gustaría conseguir esa victoria que mencionas antes del Tour? ¿En la Itzulia, por ejemplo?
Sí, o si puede ser antes, mejor. Cuanto antes. La intención es ir cumpliendo pequeñas cosas hasta llegar al gran objetivo, que es el Tour, y allí hacer las cosas bien. Aunque no se gane, pero hacerlo bien. Coger esa dinámica de correr para ganar. ¿Qué respiras de nuevo en BahrainMcLaren que sea diferente a lo que has
vivido en estos dos últimos años con Movistar Team?
Hay, quizás una estructura más marcada. Todos los campos están mucho más definidos: mecánicos, masajistas, marketing, prensa, directores... está todo mucho más marcado. También hay más gente y tienen más medios. La llegada de McLaren puede marcar, no sé si un antes y un después en el ciclismo, pero creo que pueden aportar mucho. Empezarán poco a poco, quizás en 2020 no se van a ver grandes cosas, pero sí en el futuro.
¿Qué tiene este Mikel que llega a Bahrain-McLaren?
Tiene más años (ríe), más experiencia y más ganas porque cada año ves que hasta entonces no sabías lo suficiente, y ahora sí. Y el año que viene volveré a pensar lo mismo. Y vas viendo que la gente con la que estás corriendo y la gente que gana no está tan lejos como parecía hace cuatro años.
Eso ya lleva sucediendo un tiempo. Han pasado Contador, Fabio Aru, Froome, Geraint Thomas, ahora Bernal. Y tú sigues estando ahí.
He tenido una maduración más lenta, voy con mi progresión. Me mantengo ahí, no gano nada pero estoy entre los diez primeros. Aquí sólo gana uno y no pasa nada por no hacerlo, pero estoy ahí siempre y hay rivales que te tienen en cuenta. Algún día puede llegar la victoria.
LÍDER ÚNICO EN EL TOUR
¿Cuál es la diferencia entre ser siempre tan regular y ganar?
La perfección y un poco de suerte.
Me ha faltado suerte para estar más arriba, sobre todo por caídas porque la contrarreloj es cosa de trabajo. Y luego hay que hilar muy fino. Ir a un Tour de Francia como lo hace Sky, con las ideas tan claras, con un objetivo muy marcado, es mucho más fácil que acudir como lo hemos hecho con Movistar, con tres líderes. Es muy difícil cuando entre cinco tíos tienen que proteger a tres o, cuando nos va todo bien, yo me caigo y el equipo tiene que esperarme a mí en vez de aprovechar la oportunidad con los que van delante. Es muy complicado sacarle partido a un equipo con esa situación. ¿Te vas con algún remordimiento del Movistar Team?
No, me voy con pena de no haberme ganado la confianza de los de arriba para liderar una grande, tener una oportunidad en un Tour. Has sentido que eso te ha faltado.
Sí. No la he tenido, por eso me he ido. ¿Cómo ha sido la salida?
Buena. He tenido muy buenos compañeros, los mejores que he encontrado hasta ahora en toda mi carrera. Me queda esa pena, de no haber podido disfrutarlos o aprovecharlos al menos una vez.
Sí. Creo que en este Giro íbamos en camino, pero no me salieron buenas cronos. Luego vieron a un buen Mikel ayudando a Richie (Carapaz), pero me hubiera gustado sacarles más partido. ¿Tienes ganas de sacar ese partido de ti mismo?
Sí. Estoy a tiempo. ¿Qué Mikel vamos a ver en 2020?
No lo sé todavía. Habrá que ver dónde nos deja mi situación en las cronos, comprobar si he mejorado o no. Y a partir de ahí, la carrera y la forma de correr del equipo también influirá.
Entra McLaren con mucha tecnología y experiencia en temas aerodinámicos, cálculos... y quizás hay que ser un poco más conservador para ganar. Ya veremos. ¿Vas a ser capaz?
No lo sé, creo que sí. Ya veremos (sonríe) El equipo quiere mezclar pasión y tecnología. O de que hubiesen visto al Mikel más grande para que hubiesen apostado por ti.
Y tú tienes mucho de pasión.
Mucho.
Entonces, ¿podrás mantener el ADN landista?
Sí, habrá que mantenerlo.
¿Vas a trabajar la contrarreloj?
Sí, ya tengo ganas de cogerla. Siento que hay un equipo detrás que me apoya en ello y estamos haciendo cosas. Me apetece afrontar una crono y ver dónde estoy.
¿Estás sintiendo que aquí sí te hacen ver que eres el líder del equipo?
Sí, eso me lo han transmitido desde el principio, que la gente está para mí. Durante el año habrá muchas carreras y encontraré compañeros que querrán disputar, es lo normal. Pero el camino al Tour de Francia parece que está claro.
¿Te has imaginado de amarillo? ¿Has soñado alguna vez con ello?
Alguna vez sí, pero pocas. ¡Más de rosa! (ríe) Lo he visto más cerca.
¿Y ahora, transcurrido el tiempo, qué piensas?
Te das cuenta de que a veces te ha faltado un poco de ambición, de agresividad. Pero...
¿De ambición?
Sí, quizás de ambición. Puede que a veces me haya conformado o no leyera la carrera lo suficientemente bien. No me he atrevido, por lo que sea.
¿Y eso cómo se cambia?
Con experiencia, conociéndote, viendo lo que ha pasado y poniéndolo en práctica al día siguiente.
SOBRADO DE GANAS ¿Hambre, tienes?
Sí. Tengo muchas ganas. He aprendido muchísimo estos últimos años y quiero ponerlo en marcha.
Siempre se habla del 'aprender' cuando no se gana. ¿Pero qué se aprende cuando no se gana, en medio de esa frustración?
Pues si no subes al podio por un segundo, te tienes que acordar de ese segundo desde el primer día. Si has perdido por la crono, pues sabes que tienes que apretar ahí. O no te has atrevido a atacar porque creías que no ibas bien y después ves la etapa repetida y te das cuenta de que los demás tampoco iban tan bien. A veces se cometen muchos errores y pecas de pensar que vas peor. He aprendido de un montón de situaciones, de verdad. Porque te das cuenta que el mayor culpable eres tú. Casi todo depende de uno mismo; quitando alguna caída que te pueda pasar, el resto depende de uno: el no atacar, el hacer una crono mejor... todo eso depende de ti. ¿Y el aspecto de tener más ambición cómo se trabaja?
Eso se tiene o no se tiene. No se trata de pulirlo. Es algo demasiado difícil de trabajar. Este año tengo la misma ambición, pero veo más oportunidades de darle rienda suelta, más espacio, un equipo en una dirección. La tuya.
A ver...