MUNDIAL DE CICLOCROSS
Van der Poel, arcoíris por aplastamiento.
El circuito de la localidad suiza de Dübendorf corroboró el dominio absoluto del nieto de Poulidor y deparó emocionantes carreras, como el duelo de neerlandesas en categoría femenina, en el que Ceylin del Carmen Alvarado se llevó el gato al agua. Iván Feijoo terminó 6º en sub23.
El guión estaba escrito tras una temporada en la que Van der Poel ha dominado la especialidad con una solvencia insultante, aunque antes del pistoletazo de salida soñáramos con que los Iserbyt, Pidcock o incluso un recuperado Van Aert, que en las carreras previas había demostrado un nivel creciente enfocado a llegar al máximo a este Mundial, pudieran plantar batalla. Pero los milagros en ciclismo rara vez existen y apenas unos cientos de metros, sobre un circuito completamente embarrado en el que las diferencias entre el más fuerte y el resto quedaban más patentes, bastaron para comprobar que, salvo incidente en forma de avería mecánica o caída, el arcoíris volvería a recaer sobre las espaldas de Mathieu. Por detrás, la armada belga formada por Aerts, Iserbyt, Vanthourenhout y Sweeck, con el joven Thomas Pidcock como invitado, perseguía infructuosamente con la mente más centrada en la lucha por el segundo escalón del podio que en un auténtico intento de reducir las distancias. Cruz para Felipe Orts, que sufrió problemas mecánicos en su bici apenas darse la salida, quedando relegado a cola del grupo. Comenzaba aquí una nueva carrera para el alicantino, quién se ponía el mono de trabajo para poco a poco escalar hasta la 14ª posición, que deja un sabor agridulce teniendo en cuenta sus prestaciones previas. Nuestro otro representante,
Kevin Suárez, ofreció un rendimiento sólido, rodando toda la prueba en torno al puesto 27 en el que finalizaría. Con Van der Poel sin fisuras, la atención se centraba en los perseguidores con escarceos que no iban a ninguna parte, hasta que en la tercera vuelta Pidcock hizo estallar el grupo con su ataque.
Una ofensiva que a la postre llevaría al británico a lograr la plata, mientras que el bronce se decidía por mera selección natural a favor de Toon Aerts. Destacada actuación de Wout Van Aert, quien tras un discreta salida fue picando piedra para hacerse con la medalla de chocolate.
PLENO NARANJA
Al contrario que en la prueba masculina, las chicas nos hicieron disfrutar de una vibrante batalla hasta el final, salvo por el detalle de conocer el país que se haría con la victoria. Desde los primeros compases de la prueba, un cuarteto formado por las neerlandesas Ceylin del Carmen Alvarado, Annemarie Worst, Lucinda Brand y Yara Kastelijn se destacaban del resto, iniciando desde la segunda vuelta una sucesión de ataques y contraataques de los que Kastelijn sería la única damnificada, descolgándose de sus compatriotas y siendo alcanzada por la norteamericana Katie Compton, 4ª al final de la prueba. Las tres corredoras llegaban con las espadas en alto a los últimos metros, en los que Worst intentó sorprender con un duro ataque en el puente que daba acceso a la recta
de llegada. Sólo Alvarado consiguió aguantar el demarraje, decidiéndose el campeonato en un cerrado sprint en el que se impondría la punta de velocidad de la joven Ceylin del Carmen por apenas unos centímetros, mientras que Lucinda Brand cerraba el podio cruzando la meta diez segundos más tarde. Buen papel de las nuestras, con Lucía González finalizando 18ª pese a sufrir dos caídas y Aida Nuño un par de puestos por detrás, pese a que, como nos cuenta en la entrevista de este mismo número, el rápido y seco circuito no favoreciese sus características. Cerró la participación española Paula Díaz en el puesto 31.
LO QUE VIENE
La disputa por primera vez del Campeonato del Mundo en categoría júnior femenina da buena muestra de la creciente popularidad de la especialidad y del auge de la misma entre las chicas más jóvenes. Una categoría en la que la neerlandesa Shirin Van Anrooij se alzó con la victoria, mientras que nuestras tres representantes, Lucía Gómez, María Parajón y Ainara Albert, se fogueaban a nivel internacional concluyendo en los puestos 34, 42 y 45, respectivamente. En lo que respecta a los chicos, si en la élite es el nieto de Raymond Poulidor quien impone su ley, en júnior los genes también juegan un papel importante con Thibaut Nys, hijo del gran Sven -doble campeón mundial-, atrapando el triunfo. Nutrida participación española en la que Igor Arrieta -40º- lograba el mejor resultado de nuestra escuadra. Sólo la carrera sub23 femenina contó con un arcoíris de una nacionalidad distinta a neerlandeses o belgas, al proclamarse vencedora de la prueba la francesa Marion Norbert-Riberolle, con Sofía Rodríguez como primera española en el puesto decimoséptimo. En la prueba sub23 masculina la victoria fue a parar a manos de Ryan Kamp -Países Bajos- con un enorme Iván Feijoo -6º- colándose en el top10 tras firmar una monumental remontada.