Minibomba Lezyne Pocket Drive

Junto a una multiherramienta -como la del anterior Al Detalle- también debemos llevar siempre una bomba para dar presión si tenemos la mala suerte de sufrir un pinchazo. Lezyne ha incorporado recientemente a su nutrida familia de minibombas el modelo Pocket Drive, que a pesar de su tamaño y peso muy reducidos, no da de lado la efectividad al hinchar y otras cualidades pocas veces vistas en una bomba de este tamaño.

Su construcción en aluminio CNC posee unos acabados excelentes y cuenta con detalles como la textura del mango para mejorar el agarre o el latiguillo flexible desmontable -roscado al cuerpo de la bomba-, compatible con los dos tipos de válvulas -una en cada extremo- y muy bien protegido con tapas de goma cuando no se utiliza. Para quienes no deseen llevar la bomba en un bolsillo del maillot, la bolsa del sillín o el bote de herramientas, también incluye un soporte con dos abrazaderas y velcro que la fija junto al portabidón.

La unión del latiguillo a la válvula va roscada -incompatible con los alargadores de válvula que carecen de ella-, por lo que debemos entretenernos un poco más de lo habitual antes de comenzar a bombear, pero después no tendremos que preocuparnos de mantener la válvula perpendicular a la bomba gracias al latiguillo flexible. Debido a su tamaño, para alcanzar las presiones utilizadas en cubiertas de carretera habrá que emplearse a fondo dando bombazos, pero hemos alcanzado los 100 psi sin las molestas pérdidas de presión que sí podemos sufrir con otras bombas de plástico o sin latiguillo. Como curiosidad, la marca promete que podemos llegar a 160 psi, una cifra que sólo necesitan los tubulares para pista.