Mussara Reus
1 El cambio de fechas no condicionará el recorrido propuesto, ya que todo transcurre por la misma provincia y los diferentes municipios por donde pasa son muy similares. Por tanto, entendemos que tendrán las mismas normas.
2 No, con las circunstancias excepcionales que vivimos, el cupo de inscripciones que teníamos previsto para este año no se venderá. Lo que hará bajar la participación serán las medidas que seguramente nos harán tomar las autoridades -de seguridad y sanitarias-, así como la incertidumbre que hay en estos momentos y el miedo a las aglomeraciones. Además, sabemos que es muy probable que limiten la marcha a una participación determinada.
3 La falta de preparación no creemos que haga disminuir la participación, ya que tenemos varias distancias a las que el cicloturista puede adecuar su estado de forma.
4 Hemos hecho una encuesta a todos nuestros clientes para conocer su opinión, lo que les preocupa y cómo ven los eventos en un futuro. Es fundamental tener esa información. Viajar lejos de sus casas, las aglomeraciones y las medidas sanitarias son sus principales preocupaciones. La gente se pensará mucho coger sus coches y reservar hoteles. Todo lo que conlleva la logística seguro que se complicará. Y hay que sumarle la incertidumbre de la evolución de la situación.
5 Estamos trabajando en esta cuestión, pero a día de hoy no podemos decir nada en concreto. Permanecemos a la expectativa de cuáles serán las normas por parte del Gobierno y de las autoridades sanitarias para llevar a cabo este tipo de eventos con todas las garantías.
6 Tenemos mucho miedo y nos tememos lo peor. Pensamos que puede ser peor el remedio que la enfermedad. Imagínate que por razones de sanidad tenemos que obligar a hacer la marcha con mascarilla, mantener la distancia social, no rodar en pelotón, programar salidas por grupos reducidos, eliminar los servicios al participante para evitar aglomeraciones, no tener duchas ni vestuarios, no celebrar la comida final, etc. Si ese es el panorama, ¿a quién le apetecerá hacer una marcha y pagar por ello? La situación es muy complicada.
7 Les pediría dos cosas: ayuda y comprensión. Nuestros eventos dejan dinero en la ciudad y/o pueblos por donde pasan. Hasta ahora nunca hemos pedido nada; es más, siempre hemos pagado por los servicios municipales y contratado a proveedores locales para arraigar la marcha a la ciudad. Ahora, con la bajada de participantes, la devolución de inscripciones realizada y la subida de los costes del evento para adecuarse a las normas, la realidad es que las marchas cicloturistas serán deficitarias. Por eso pedimos ayudas económicas y exoneración de costes municipales, tasas, etc., para que no lo asuma todo el organizador. Si ponemos todos -participantes, organizadores y autoridades- un poco, podríamos salir adelante a medio plazo. Si todo le toca asumirlo al organizador, el futuro es más que complicado y la historia se acaba en breve. Otro factor es el problema con los patrocinadores: los recortes del patrocinio, los incumplimientos de contrato, etc. Como en el resto de sectores, es hora de remar todos a una, ser solidarios y no mirar sólo por nuestros intereses personales.