Pionera y pedaleando
María del Carmen Díaz de Lezana, nacida en 1943, es una pionera del ciclismo femenino. Actualmente continúa con su pasión por este deporte dentro de la
S.C. Orduñesa. En los días de confinamiento que hemos vivido, en los que sus hijos no le permitíamos salir de su casita de campo, recorría hacia adelante y hacia atrás los trescientos metros de la zona asfaltada que tiene allí, porque no podía evitar coger la bicicleta y era consciente de que no estaba permitido salir a la carretera.
Su pasión se remonta a las excursiones que hacía con su padre, propietario de un taller de bicicletas. Y en aquella época no eran los hombres los que le hacían menosprecios por ser mujer. En muchas ocasiones eran las propias mujeres quienes le echaban miradas de reproche -en una bici de carreras, mujer y con pantalones-. Por eso, ella siempre llevaba en su bolsita una falda para ponérsela encima de los pantalones en cuanto realizaban una parada.
En 1963 pretendió participar en los Campeonatos del Mundo de ciclismo, pero eran otros tiempos en los que a las mujeres les estaba vedada su práctica por ser un deporte poco femenino. Llegó la notificación de la Sección Femenina de Deporte -que presidía Pilar Primo de Rivera- donde se le denegaba la licencia para participar en los Mundiales de ese año. En 1964 y 1965 se volvió a intentar, pero tampoco fue posible.
TRIUNFO EN SU ÚNICA CARRERA
Pese a todo, Mª Carmen acudía a todas las exhibiciones de profesionales que la cursaban invitación: Subida a Urkiola, Subida a La Reineta, Subida a Orduña, etc.
Una vez se desplazó junto a su padre en bici a Gernika desde Orduña para ver una prueba de juveniles y le animaron a participar en la única carrera que le permitieron disputar en su vida. Y con 21 añitos... les ganó la partida a los júniors.
Cuenta con el reconocimiento de la Asociación Internacional de Cicloturismo, y es que ha participado en algunas de las pruebas más importantes del mundo: -París-Brest-París. La completó en 1995 acompañada por su hija Amaia. 1.200 kilómetros en 88 horas y 10 minutos. -Burdeos-París. Cuatro veces.
-Luchon-Baiona. Cuatro veces.
-A la Expo en bicicleta con su hija.
-Camino de Santiago. La última vez con dos de sus hijos, Jon Ander y Amaia, y su nieto Asier.
-Ha hecho casi todas las ediciones de la Bilbao-Bilbao. -Rutas Catalanas y Rutas Leonesas.
-Vuelta a Cantabria.
-Randonneur de los Alpes.
-Giro de los Dolomitas.
Y así infinidad de pruebas. Ahora le gusta más participar en eventos de ciclismo retro, donde está en su salsa y la acogen con muchísimo cariño.
Estos días recibió un reconocimiento muy emotivo para mi madre. Orduña, su lugar de residencia, celebraba sus fiestas locales, Otxomaio, y a pesar de las circunstancias se han festejado desde los balcones. Cada año se elige a una txupinera/o y al que va a dar el pregón. En esta ocasión, como en otras precedentes, se llevó a cabo por votación popular y la escogieron de txupinera -la
S.C. Orduñesa, en su 50º aniversario fue la más votada para dar el pregón, así que todo quedó en el mundo del ciclismo-. Mª Carmen se paseó por las calles con su bicicleta, mientras los orduñeses la vitoreaban desde los balcones.
Ainhoa Pikaza