La fuga que animó la jornada
► Volvía el ciclismo a tierras navarras después de un año de parón y cancelación obligada por la pandemia y lo hizo a lo grande. Hasta el sol no quiso perdérselo; las buenas temperaturas brindaron una jornada de ciclismo espectacular. De la fiesta que supone el regreso del ciclismo, de la vida en esta nueva normalidad aunque sea con mascarillas y distancia social, quisieron formar parte todos, actores principales y secundarios. De estos últimos fue el protagonismo en la primera parte de la carrera, cuando los WT dejaron hacer y una fuga de seis hombres se fraguó en los primeros kilómetros. Vincenzo Albanese (Eolo-Kometa), Emerson Oronte (Rally), Antonio Carvalho (Efapel), Mikel Aristi (Euskaltel-Euskadi), Ángel Madrazo (Burgos-BH) y Jon Irisarri dieron color al inicio.
Fue precisamente el guipuzcoano del Caja Rural-Seguros RGA el que más lejos llegó de la escapada. En las duras rampas de Eraul, el de la espiga tuvo que claudicar frente a los ataques que empezaron a multiplicarse. En ellos estuvo presente también el equipo de Juanma Hernández de la mano de Jefferson Cepeda, que tomó el relevo a su compañero en el que suponía su debut en la presente temporada. Para entonces, Irisarri ya se había asegurado la presencia en el podio con el premio de las metas volantes. Después llegó el turno del ecuatoriano, que se fue junto a Luisle, Hermans y Swift, pero no pudo con el ritmo del murciano en la subida. Aun así, el balance de los navarros es positivo. "El trabajo de todo el equipo ha sido fantástico. Estuvimos donde teníamos que estar en cada momento y hemos dado una muy buena imagen", subrayó Cepeda.