Rápidas y fiables

Las cubiertas Pro ONE son el modelo más avanzado de la gama del fabricante alemán para carretera -si obviamos las ligerísimas TT, ya sólo en versión tubeless (220 g en 25 mm), específicas para contrarreloj y que también las podemos utilizar para citas especiales porque su duración es menor-. Disponibles tanto en opción tubeless como para cámara, las Schwalbe Pro ONE destacan por su construcción con la nueva carcasa Souplesse de varias capas -la marca asegura que ha conseguido una sensación de rodadura similar al tubular- y el compuesto Addix Race, con más sílice en su mezcla, que anuncia una mejora del 22% del agarre y un 13% de menor resistencia a la rodadura. Además, incluyen la protección antipinchazos V-Guard, de 14 mm para cubrir toda la banda y que ha mejorado su eficacia un 30% respecto a la generación anterior.

Las encontraremos en 25, 28, 30 y 32 mm -en 23 mm sólo para cámara- tanto en negro como con los flancos en color crema, nuestra elección esta vez para darle un toque retro a la bici. Schwalbe destaca que las medidas son reales con llantas con anchura interna de 19 mm, mientras que crecen en torno a 1 mm si el ancho es de 21 y 2 mm si es de 23. Hemos probado durante más de 1.000 km la versión para cámara de 28 mm -253 gramos de peso- y nos han acompañado tanto en nuestras salidas habituales por carreteras bastante sucias en Madrid como en viajes como el que mostramos en el número anterior en Andorra, donde nos ofrecieron bastante confianza en las empinadas bajadas de los puertos de la zona. Aún no hemos pinchado y el desgaste no es muy acusado, por lo que confiamos en que le queda más de media vida útil en la cubierta trasera y mucho más en la delantera. Saber más: www.schwalbe.com