Los funcionarios podrán teletrabajar tres días a la semana a partir de 2022
Montero respetará el pacto alcanzado en abril entre los sindicatos e Iceta La fórmula será voluntaria y amplía el margen actual de un día
Los funcionarios públicos podrán teletrabajar, de forma voluntaria, hasta tres días a la semana desde el año que viene. Así lo recogerá un real decreto ley que estará listo en las próximas semanas y entrará en vigor a partir del 1 de enero de 2022. Según confirman fuentes del Ministerio de Hacienda y Función Pública, la normativa respetará los acuerdos alcanzados hasta la fecha entre el Gobierno y los sindicatos, permitiendo que estos empleados públicos puedan trabajar a distancia tres días semanales.
El anterior ministro de Función Pública, Miquel Iceta, cerró el pasado mes de abril un acuerdo con los principales sindicatos para regular el teletrabajo de los funcionarios. Este pacto, sin embargo, no llegó a hacerse efectivo mediante un real decreto, y en octubre el Gobierno restableció la vuelta a la presencialidad del personal de la Administración General del Estado (AGE) dando luz verde únicamente a un día de trabajo a distancia (20% de la jornada semanal).
Fuentes del CSIF, la Central Sindical Independiente y de Funcionarios, confían en que “en unos pocos días” el Ejecutivo se siente con los sindicatos para rubricar el nuevo acuerdo. El objetivo, según anticipó esta última semana la ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero, en la Comisión de Hacienda del Congreso de los Diputados, es que la nueva norma esté aprobada en el mes de diciembre para que surta plenos efectos a partir de enero.
Lo que se pretende, según la ministra, es incentivar que haya empleados públicos en lugar de residencia en riesgo de despoblación sin que repercuta la calidad de la prestación del servicio público. Esta iniciativa nace después de la experiencia con la pandemia, que ha dejado aprendizajes para el buen impulso de este decreto, según Montero.
Ya en abril, el acuerdo alcanzado entre Iceta y los sindicatos CSIF, CC OO, UGT y CIG contemplaba implementar el teletrabajo en la Administración General del Estado (AGE) para dar una oportunidad a las
Hacienda prevé ratificar la norma en diciembre para que esté en vigor desde enero
“zonas en declive poblacional”. También se barajaba un plan de captación del talento para promover que los ciudadanos se orienten laboralmente a la función pública.
Con la vuelta a la presencialidad, CSIF propuso en septiembre un modelo híbrido definido por un 40% de presencia física y un 60% de trabajo a distancia. El sindicato instó a “poner en valor la experiencia positiva que ha supuesto el desempeño del trabajo en modo telemático que durante todos estos meses de pandemia ha garantizado el funcionamiento de la Administración”.
El pacto de abril establece, recuerda Europa Press, que la jornada de teletrabajo será la que corresponda a cada empleado público de acuerdo con el calendario laboral y las instrucciones de jornada y horarios, y se podrá prever la existencia de un horario fijo de disponibilidad y localización dentro de la jornada laboral, así como mecanismos de control.