La cédulas disparan la emisión de deuda en España hasta marzo
Las colocaciones de emisores españoles crecieron un 81% en el primer trimestre
Tras tres años consecutivos en los que el volumen de emisiones de renta fija efectuadas por colocadores españoles en el mercado patrio ha sido inferior al registrado en mercados internacionales, en los primeros tres meses del año la tendencia se ha dado la vuelta. Las colocaciones de deuda de emisores españoles alcanzaron en el primer trimestre los 42.858 millones de euros, un 81% más que en el mismo periodo de un año antes. Por contra, las emisiones realizadas en el exterior en los dos primeros meses de este ejercicio fueron de 13.231 millones, menos de la mitad que las registradas en el mismo periodo de 2021, de acuerdo al último boletín trimestral de la CNMV.
Este fuerte incremento se debe, según apunta el supervisor del mercado, al crecimiento significativo de las emisiones de cédulas hipotecarias y territoriales –la deuda más segura que pueden emitir los bancos– y de las titulizaciones. En concreto, el volumen de colocaciones del primer tipo se multiplicó casi por cinco, mientras que las titulizaciones se multiplicaron por tres frente al primer trimestre de 2021. La CNMV apunta que el incremento de la colocación de cédulas hipotecarias “podría estar asociado a su uso como colateral para obtener financiación en las próximas subastas de liquidez del BCE” (TLTRO III).
El supervisor considera además que la decisión del Gobierno de eximir a los emisores de la obligación de realizar un folleto para los pagarés de menos de un año, y otras medidas adicionales de la CNMV destinadas a simplificar y agilizar los procesos, habrían logrado un impacto positivo.
Durante el primer trimestre el retroceso en las emisiones de bonos en el mercado español por inversores patrios se justifica en parte por Sareb, que emitió 4.235 millones de euros, frente a los 9.470 millones colocados un año antes.
También repuntaron las emisiones ejecutadas en el mercado de renta fija MARF, que subieron un 22,5% frente a un año antes, siendo un 97% de ellas pagarés.
El supervisor explica en el informe que de consolidarse esta tendencia se podría deducir que las grandes empresas aprovecharon el año pasado para cubrir gran parte de sus necesidades de financiación ante el fin de la era de los tipos ultrabajos y de las menores compras de deuda del Banco Central Europeo, y este año no han acudido en masa al mercado de capitales.
En el caso de las emisiones de bonos sostenibles (ESG por sus siglas en inglés) de emisores españoles, la CNMV apunta a una reducción del número de colocaciones a cinco, desde las 18 de un año antes, si bien el importe es similar. Todas ellas, menos una, fueron en el extranjero.
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