Los tribunales resolvieron un 25% más de despidos que antes de la pandemia
Los juzgados de lo social sacaron adelante un 42% de casos más que en 2019 El 17% de las extinciones se desistieron
La recuperación del empleo en 2021 ha traído consigo también una mayor conflictividad en el mercado de trabajo. El año pasado, los tribunales de lo social, que dirimen los conflictos judiciales de ámbito laboral, resolvieron casi 400.000 asuntos, lo que supuso un 18% más de casos que antes de la pandemia.
Este dato está incluido en el balance anual de asuntos judiciales publicado este viernes por el Ministerio de Trabajo y que refleja también un fuerte avance del 42% de casos resueltos en esta materia en comparación con el año 2020. Si bien, para calibrar el aumento de esta conflictividad es más correcto comparar con 2019, porque en 2020 la pandemia condicionó fuertemente a la baja la actividad de los tribunales. Por este mismo motivo, los fuertes incrementos de estos casos respecto a antes de la pandemia obedecen en parte a que en 2021 se resolvieron parte de los asuntos que no pudieron salir adelante en 2020.
De esta forma el mayor dinamismo del empleo y el desatasco judicial tras la pandemia fueron las dos principales causas que llevaron a un mayor incremento de la actividad en estos juzgados, según las fuentes jurídicas consultadas.
En el pasado ejercicio de todos los tipos de conflictos judiciales resueltos en materia laboral los que más se incrementaron fueron los despidos, con un 25% más de casos que en 2019, antes de que estallara la pandemia de Covid-19. En total, los tribunales de lo Social resolvieron 135.361 casos individuales de despido, de los que la mayoría (62.578) se resolvieron antes de entrar en el juicio, mediante un procedimiento de conciliación; mientras que los 38.197 restantes requirieron una sentencia judicial para ser resueltos. Los primeros experimentaron un incremento del 24% frente al 17% de los pronunciamientos de los jueces. El resto, hasta sumar los 135.361 despidos fueron casos resueltos por desistimiento u otras causas.
Lo que no ha experimentado ningún tipo de cambio respecto a antes de la pandemia es el sentido de las sentencias. Así, el pasado año el 80% de las resoluciones judiciales fueron favorables para el trabajador total o parcialmente y el 20% restante fueron desfavorables para los empleados. Este reparto fue idéntico entre las sentencias por extinciones de contrato emitidas en 2019, antes de la crisis sanitaria. El hecho de que el peso de las sentencias favorables al trabajador sea el mismo antes y después de la pandemia es llamativo porque durante el pasado año estuvo vigente la prohibición de despedir de forma objetiva por causas relacionadas por el Covid, lo que sugiere que los argumentos de los despidos no han estado argumentados por la situación de crisis..
Tras los despidos, el tipo de conflicto laboral que subió más el pasado año en comparación con 2019 fueron los de carácter colectivo, que también subieron un 24%.
En tercer lugar, los asuntos relacionados con la Seguridad Social (un 19% más), que afectan a conflictos de afiliación, cotización, prestaciones y accidentes o enfermedades profesionales. Por último, las que menos aumentaron fueron las reclamaciones derivadas de los contratos de trabajo (salarios, vacaciones u horarios), que se incrementaron un 12% respecto a antes de la pandemia. Si bien en el caso de las demandas por irregularidades contractuales
La recuperación del empleo y el desatasco judicial llenaron los juzgados
La indemnización media por despido fijada por los jueces fue de 8.954 euros
prácticamente la mitad (de 41.299) la resolución judicial fue el desistimiento.
En el caso de los trabajadores despedidos los jueces desistieron el 17% de las demandas recibidas.
En cuanto a las cantidades reconocidas por los jueces para las indemnizaciones por despido, estas sumaron 914,8 millones de euros en 2021, lo que supuso un incremento del 7% respecto a antes de la pandemia y un 21,4% más que en 2020.
No obstante la cantidad media recibida por trabajador disminuyó de 9.583 a 8.954 euros entre 2020 y 2021, por el aumento del número de despidos. Según estas cifras, las cantidades reconocidas por los jueces coinciden plenamente con las que recoge la Agencia Tributaria a través de las exenciones de tributación de las indemnizaciones por despido. Este organismo fijó la compensación media el pasado año en 8.965 euros por trabajador despedido.