El alza de la energía eleva en 10.800 millones las compras de la industria exportadora
La apreciación de las materias primas sumó otros 700 millones Las importaciones crecieron un 39% anual frente al 24% de las ventas
La inflación le ha hecho un agujero sin precedentes a la industria exportadora. Si las exportaciones de mercancías crecieron un 23,9% en el primer trimestre, hasta alcanzar un nuevo máximo histórico (89.611 millones), las importaciones, muy influenciadas por el alza de la energía y de las materias primas, se dispararon un 39% anual, hasta los 105.027 millones. De esta manera, el déficit comercial entre enero y marzo se quintuplicó respecto al mismo periodo de 2021, hasta los 15.416 millones de euros.
El alza del petróleo, del gas y de la electricidad ha dinamitado los márgenes de las empresas exportadoras. Las importaciones energéticas pasaron de 8.393 millones de euros en el primer trimestre de 2021 a 19.197 millones en el mismo periodo de 2022, lo que supuso un sobrecoste de 10.805 millones de euros.
Inflación
Por partidas, la que mayor peso tuvo fue el petróleo, cuyas importaciones se duplicaron (de 6.624 a 12.088 millones), seguida por el gas, cuyas compras se quintuplicaron (de 1.323 a 5.406 millones) y por el carbón y la electricidad, que también se cuadruplicaron (de 444,1 a 1703,1 millones). En el informe, el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo aclara que del crecimiento del 39% de las compras de mercancías en el primer trimestre, un 21,1% correspondió al incremento de precios y el resto al aumento de los intercambios.
El otro elemento distorsionador fue el de las materias primas, también muy influenciado por la inflación. Si en 2021, las empresas destinaron 2.603 millones en comprar minerales, alimentos y vegetales para aprovisionarse, esa factura se incrementó en 628 millones 12 meses después, con un mayor peso de los minerales (335,8 millones). Si se suma el sobrecoste de las importaciones energéticas y de materias primas, la factura se elevó a 11.433 millones de euros.
Pese a que todavía la economía española no ha recuperado los niveles precrisis, las importaciones energéticas y de materias primas están muy por encima de los registros de 2019. El coste de las compras de energía se disparó un 70% respecto a 2019 como consecuencia de la tormenta perfecta que ha vivido una economía dependiente de las importaciones: el precio del barril de Brent, de referencia en Europa, se duplicó entre marzo de 2021 y marzo de 2022, hasta rozar los 130 euros, mientras que el precio del gas alcanzó máximos históricos y ha obligado a la Comisión Europea a aprobar una excepción para España y Portugal para topar el precio del gas.
Industria química
El crecimiento del precio de la energía y de las materias primas dejó en un segundo plano el récord exportador, encabezado por el sector químico, que fue el que más vendió entre enero y marzo, con 17.119 millones, un 19,1% del total, con un fuerte protagonismo de los medicamentos (6.490 millones y un 7,2% del total de las exportaciones) y de los plásticos (4.039 millones y un 4,5%). La industria química desbancó al de la alimentación, que se ha mantenido como el más exportador durante los dos años de pandemia.