La gasolina alcanza un nuevo récord pese a la bonificación estatal
Hacienda prevé una “aportación” extra de las petroleras ante la escalada
Las medidas aprobadas por el Gobierno para frenar la escalada que sufre el petróleo tras la invasión rusa de Ucrania no han podido evitar que la gasolina, tras encadenar siete semanas al alza, haya alcanzado un nuevo máximo histórico.
Según los datos difundidos ayer por el Boletín Petrolero de la Unión Europea, que recoge el precio medio registrado en más de 11.400 estaciones de servicio españolas entre el 31 de mayo y el 6 de junio, la gasolina se vende en España -una vez aplicado el descuento- a una media de 1,848 euros el litro, mientras que el gasóleo lo hace a 1,716 euros.
Pese a que el descuento del Gobierno no ha evitado un nuevo récord de la gasolina, sí que ha frenado una escalada aún mayor, ya que el valor de este combustible si no se tuviese en cuenta la bonificación en vigor desde el comienzo de abril y que previsiblemente se va a prolongar hasta septiembre, superaría por primera vez en la historia los 2 euros por litro, situándose en 2,048 euros.
El Ejecutivo va a seguir manteniendo la bonificación de 20 céntimos al combustible mientras los precios estén altos y, de cara a la discusión sobre los Presupuestos de 2023, el Ejecutivo analizará si se debe poner en marcha “algún tipo de aportación adicional” por parte de grandes petroleras o empresas de electricidad si están teniendo márgenes de beneficios “que en este momento puedan ser no justificados”. Así lo avanzó ayer la ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero.
La bonificación de 20 céntimos al combustible, incluida en el real decreto ley contra las consecuencias económicas de la guerra en Ucrania ha impedido, según Montero, que en este momento haya precios aún “más desorbitados” respecto a la gasolina. “Todo el mundo asistimos con perplejidad a que, pese a la ayuda, los precios del petróleo sigan subiendo. Esto es un elemento que tenemos que ver que en el menor plazo posible se pueda combatir”, remarcó ayer la ministra durante una entrevista en Telecinco.
El responsable de los altos precios que marcan los carburantes en toda Europa durante las últimas semanas es el petróleo, que desde que empezó el año inició una escalada que se ha agudizado tras la invasión rusa de Ucrania y el embargo impuesto por la UE. Pese a que la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) acordó hace unos días aumentar el bombeo de crudo previsto de cara al verano, en un intento por rebajar los precios ante la pérdida de oferta rusa, existen dudas sobre la capacidad de algunos miembros para incrementar su producción.
Encadena siete semanas de subidas, con un precio medio de 1,8 euros el litro
El descuento se mantendrá hasta que los precios bajen, según el Gobierno