Puntos principales de las ayudas
Tramos. El Kit Digital, cuya primera convocatoria tuvo lugar el pasado mes de marzo, consta de tres tramos o segmentos. El primero, dotado con 500 millones de euros, se dirige a empresas que tienen entre 10 y 49 empleados y el tique medio es de 12.000 euros. El segundo tramo es para pymes que tienen entre 3 y 9 trabajadores y ofrece un tique de 6.000 euros. Por fin, el último tramo acoge a micropymes de 0 a 3 empleados y son 2.000 euros.
Fechas. La convocatoria que arrancó en marzo es la que está dirigida al primer tramo, el de las empresas de 10 a 49 trabajadores. La convocatoria para las empresas de 9 a 3 empleados se ha retrasado porque debería haberse realizado en junio, pero “parece que será en julio”, y la tercera, la dirigida a micropymes de 0 a 3 trabajadores, “parece que será en octubre y no en septiembre”, según informa Noelia Miranda.
Pasos. El primer paso para concurrir al Kit Digital es “saber dónde estoy, fortalezas, inseguridades, posición respecto a mi competencia. Dejan hacer un diagnóstico cuantas veces se quiera y un agente te va a ayudar”, declara Alberto Guilló. El siguiente paso es realizar un plan de ruta “para elegir muy bien por dónde empezar”. Seleccionar la solución según dicho plan y tener una serie de indicadores son otros pasos importantes.
Concurrencia. La responsable de la oficina Acelera Pyme del Colegio Oficial de Ingenieros de Telecomunicación señala que en estas convocatorias “lo importante es que haya concurrencia no competitiva”. Por ello, se van concediendo las ayudas por orden de llegada hasta que se acaben los fondos previstos. Una vez concedido el bono, hay un periodo de hasta seis meses para firmar un acuerdo de prestación.
Limitaciones. Pedro Fernández subraya que los requisitos mínimos para acceder a las ayudas “son muy razonables”. “No es generalizado que haya rechazos”, añade. La intención es llegar a un millón de pymes y autónomos. Las limitaciones para presentarse a la convocatorias son, entre otras, tener una antigüedad mínima como empresa o no tener deudas. En definitiva, “las habituales para cualquier tipo de ayuda”, dice Noelia Miranda.