El BCE insta a la banca a actualizar sus proyecciones de capital
En un entorno de subida de las rentabilidades de la deuda, los inversores han empezado a poner en precio una erosión de la solvencia de la banca, especialmente de las entidades periféricas. Los bancos, que este año se han visto penalizados por los temores de recesión derivados de la guerra en Ucrania, han anulado las subidas registradas ante el aumento tan esperado de los tipos de interés. En este escenario los bancos europeos están más enfocados a poner en marcha programa de recompra de acciones y adquisiciones. “Las fusiones transfronterizas no están sobre la mesa”, señaló el presidente del consejo de supervisión del BCE, Andrea Enria.
El regulador europeo pide a los bancos que planean pagar fondos a los accionistas que actualicen sus proyecciones de generación de capital para reflejar el deterioro de las perspectivas económicas. La decisión de pedir a las entidades que se abstengan de pagar dividendos como ocurrió tras el estallido de la pandemia “no es algo que pretendamos hacer nuevamente”, subrayó Enria. El responsable europeo destaca los esfuerzos acometidos por las entidades en los últimos años para evitar problemas de solvencia como los acaecido en la anterior crisis
Rehn ve justificado un aumento de tipos para poner freno a la elevada inflación
financiera. “Las entidades han sido relativamente conservadoras al retener un colchón significativo en las provisiones acumuladas durante la pandemia”, apunta Enria.
Con la vista puesta en la inflación, el miembro del consejo de gobierno de Finlandia, Olli Rehn calificó de justificada la decisión del BCE poner fin a los tipos cero después de años de política monetaria excepcionalmente expansiva. “Con el fuerte aumento de la inflación, ha habido una buena razón para acelerar la normalización de la política monetaria”, dijo Rehn en un comunicado. “Los impactos de la guerra de Ucrania se sienten en todo el mundo y la gente tiene que pagar precios más altos por la energía y los alimentos”, sentenció. La institución que preside Christine Lagarde adelantó en la pasada reunión que en julio subirá los tipos en 25 puntos básicos, la primer alza de las tasas en 11 años.