Crecer en tiempos de pandemia: ¿todo el mundo tiene un precio?
Mientras muchas empresas preparan ERTE, Amazon es una rara excepción, que quiere crecer en medio de la vorágine, contratando a 100.000 trabajadores en EE UU. Y lo hace con un incentivo, dado el repudio generalizado a moverse y tocar otros objetos y otros seres: una subida salarial de dos dólares la hora, que también beneficiará a los de otros países. Eso contrasta con la huelga convocada en Italia el lunes y con el rechazo de los sindicatos en España, que afirman que la salud no tiene precio. Surgen muchas dudas: ¿lo tendrá para algunos trabajadores en EE UU? ¿Cuánto estarán dispuestos a pagar los clientes para que otros asuman el riesgo que ellos rehúyen? ¿Será la oportunidad de los empleados de base de Amazon para reivindicar aún más su papel en la empresa?
Por el momento, quizás, esas preguntas queden en suspenso: Amazon ha parado los envíos a almacenes de productos que no son de primera necesidad.