El vino, el aceite y el queso español celebran la paz arancelaria
La industria aeronáutica y los productores de vino, aceite o queso afectados por la guerra arancelaria entre EE UU y la UE respiraron ayer tranquilos al conocer la tregua de cinco años en los recargos a las exportaciones con destino a EE UU.
La Asociación Española de la Industria y el Comercio Exportador del Aceite de Oliva (Asoliva) se mostró satisfecha con el pacto y calculó que en el año y medio que han estado activos los aranceles dejó de exportar 80.000 toneladas de aceite a EE UU y perdió en torno a 1.200 millones de euros.
Por su parte, la Federación Española del Vino (FEV) aseguró que los aranceles redujeron las exportaciones al 90% de las bodegas españolas, “que tuvieron que absorber en su margen comercial todo o gran parte de ese 25% para no elevar su precio de venta”. José Luis Benítez, director general de la FEV, valoró el acuerdo como muy buena noticia que acaba con una situación injusta. “Devuelve el optimismo a las bodegas españolas en uno de sus principales mercados de exportación. Aunque todavía queda por aclarar algunos detalles del acuerdo, lo más relevante es el cambio de actitud y el espíritu de negociación que ha primado en los últimos meses y que debería conducir a una solución en la que no haya vuelta atrás”. Por su parte, los productores de aceituna negra reconocieron un quebranto cercano a los 40 millones de euros al año.
Desde la Federación Española de Industrias de Alimentación y Bebidas (FIAB) confiaron en que las dos potencias puedan alcanzar un acuerdo negociado y definitivo a este conflicto externo a la industria de alimentación y bebidas. “Desde su imposición en octubre de 2019, un total de 113 categorías de productos españoles, que representan el 53,1% sobre el total de productos exportados a EE. UU, se han visto gravados con aranceles del 25%, causando un grave perjuicio en productos tan significativos como aceite de oliva, vino, queso, aceituna de mesa, carne de porcino, zumos, procesado de pescados o bebidas espirituosas”. La patronal destacó que, pese a la batalla arancelaria, EE UU sigue siendo uno de los principales socios comerciales de España, “el quinto destino de las ventas externas de la industria de alimentación y bebidas y el segundo socio comercial extracomunitario por detrás de China”.
La organización agraria COAG valoró también de forma positiva el acuerdo, que salva más de 2.000 millones en exportaciones. “Es un balón de oxigeno para sectores muy afectados por el impacto de la pandemia, caso del sector vitivinícola, que hace que pueda encarar la nueva campaña con una dosis extra de optimismo ante la grave caída del consumo en el mercado interno”, subrayó Miguel Blanco, secretario general de COAG.
La resolución cerrada ayer, sin embargo, no ofrece ninguna solución al conflicto entre los dos gigantes aeronáuticos. EE UU sigue acusando a la UE de ayudas de Estado a Airbus y la Comisión Europea señala con el dedo a la Administración Biden por ayudas injustificadas a la I+D e incentivos poco claro para subvencionar a Boeing.