El coste de la vivienda continúa su escalada y roza ya los niveles de hace una década
El metro cuadrado se sitúa en 1.661 euros, cifra no vista desde 2011 Avanzan tanto las casas nuevas como las de más de cinco años, según el Mitma
El precio de la vivienda en el mercado libre de la compraventa continúa su imparable escalada. Atendiendo a los datos oficiales publicados ayer por el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma), el valor medio de los inmuebles se situó en el tercer trimestre del año en los 1.661 euros por metro cuadrado, un avance interanual del 2,6% y la cifra más alta recogida en la serie histórica desde el cuarto trimestre de 2011.
Con estos precios, y teniendo en cuenta las previsiones del sector inmobiliario de cara a los próximos meses, se pone fin al parón registrado durante el periodo más duro de la pandemia, en el que la tendencia al alza vista los trimestres previos se revirtió temporalmente. Durante la crisis del Covid, de hecho, no se lograron superar los valores con los que cerró el año 2019, inmediatamente antes del estallido de la crisis sanitaria.
Las casas, sin embargo, siguen lejos de los valores previos a la anterior crisis financiera, cuando en el primer trimestre de 2008 el metro cuadrado llegó a superar los 2.100 euros.
Según los datos de la cartera que dirige Raquel Sánchez, la recuperación de los precios afecta tanto a las casas nuevas como a las viejas. La vivienda con más de cinco años de antigüedad cerró el mes de septiembre en los 1.653 euros, de nuevo la cifra más alta para esta tipología de inmueble desde finales de 2011 (1.681 euros). La vivienda nueva, con hasta cinco años de antigüedad, se situó por su parte en los 1.939, un valor no visto desde el primer trimestre de 2012.
La escalada de los precios, según prevén los expertos del sector, irá a más en los próximos meses debido a un aumento de la demanda de inmuebles, motivado en buena parte por el ahorro embalsado y el parón en las compras durante la pandemia. A este aumento de la demanda se le añade una caída de la oferta que bebe del freno en la construcción, afectado por la crisis de suministros y el encarecimiento de los materiales, así como por la falta de mano de obra cualificada.
Esta situación ha llevado a parte del sector inmobiliario a alertar de la formación de una nueva burbuja en torno a la vivienda, un peligro que por ahora rebajan organismos como el Banco de España u organizaciones como la patronal de las tasadoras. Según señalaba recientemente el supervisor, la situación del mercado inmobiliario no se encuentra en una fase preocupante y, aunque el crédito hipotecario nuevo esté creciendo con fuerza en 2021, no se observa una relajación en las condiciones de concesión. El Banco de España, sin embargo, sí reconoce que si los ritmos de compra se mantienen en los niveles actuales, el stock inmobiliario disponible podría ser insuficiente para absorber la demanda.
La Asociación Española de Análisis de Valor asegura, por su parte, que aunque los precios estén subiendo el ritmo de compraventa se sitúa alrededor del 2% de todo el parque residencial del país, una cifra que muestra “equilibrio” y que queda lejos del 4% anotado durante los años previos al boom inmobiliario. La patronal de las tasadoras, eso sí, espera que el valor de los inmuebles siga creciendo en los próximos meses a un ritmo que oscilaría entre el 3% y el 6%.