Un puente para reducir la brecha de género tecnológica
El mundo de las TIC es muy masculino. De cada cinco especialistas en España, una es mujer, según datos de 2020 del Observatorio Nacional de Tecnología y Sociedad.Y en lo que a formación se refiere, la brecha se ha ido agrandando. Las alumnas de FP superior de Informática han pasado del 26,9% al 10,1% en menos de 20 años. En Ingeniería Informática, del 30,1% en 1985 al 12,7% en 2019, según un análisis reciente de la Unidad de Igualdad del Ministerio de Educación.
En los bootcamps, de acuerdo con un estudio de Mobile World Capital, parece que se van salvando distancias. En 2020, las mujeres supusieron el 36% de las matriculaciones y se preveía que llegasen al 40% en 2021. Y en este contexto hay propuestas, como Adalab, dirigidas exclusivamente a ellas. “Si las mujeres no empezamos a tener estos perfiles tecnológicos y a desarrollar estas competencias, vamos a seguir teniendo muchos problemas de empleabilidad”, advierte Inés Vázquez, CEO de Adalab. También apunta a la necesidad de crear referentes y de que las mujeres no se queden fuera de un presente y futuro marcados por la tecnología.