La AIE y la OPEP vuelven a recortar su estimación de demanda de crudo
El menor consumo por la desaceleración global de la economía evitará un shock por el descenso de la producción rusa
La Agencia Internacional de la Energía ya no prevé una “crisis de suministro mundial” en el petróleo a causa de la reducción de las exportaciones de crudo ruso. Aquella advertencia con que la agencia respondía en marzo al inicio de la guerra en Ucrania ha dado paso ahora a una nueva rebaja en las estimaciones de demanda global de petróleo, que también secunda la OPEP, con la que podría quedar neutralizado el impacto de la retirada del crudo ruso del mercado.
El precio del barril Brent, que llegó a dispararse al filo de los 130 dólares en marzo, se ha relajado en la actualidad al entorno de los 107 dólares, aunque aún no consigue caer de los 100 dólares en que cotizaba con anterioridad a la guerra en Ucrania. Ahora, la menor demanda que se prevé para este año puede contribuir a la estabilización de su precio, pese a creciente tensión geopolítica.
En su informe mensual sobre el mercado publicado ayer, la AIE reduce en 70.000 barriles diarios las proyecciones de la demanda que había hecho en abril, cuando ya había recortado las de marzo en 260.000 barriles. La razón principal es la fuerte ralentización del consumo en China a causa de las restricciones por el Covid, que se traducen en 890.000 barriles diarios menos en el segundo trimestre de lo que había estimado hace solo un mes. También está pesando el efecto para los consumidores de todo el mundo de la subida del precio del barril y más aún los problemas de aprovisionamiento de algunos carburantes (como el diésel en Europa) por el parón de las importaciones procedentes de las refinerías rusas. Al final, la agencia calcula que el consumo medio de crudo en 2022 en el mundo será de 99,4 millones de barriles, es decir 1,8 millones más que lo consumido durante el año pasado.
Por lo que respecta a la producción, las sanciones están haciendo mella en Rusia, aunque algo menos de lo que había anticipado la AIE. De confirmarse las estimaciones de la agencia, la producción rusa de petróleo en el conjunto de este año se podría quedar en una media de 9,6 millones de barriles diarios, que sería la más baja desde 2004.
La OPEP también rebajó este jueves por segundo mes consecutivo su previsión de consumo de crudo para 2022, hasta situarlo en 100,3 millones de barriles diarios, un 0,6% menos que los datos que manejaba antes de la invasión rusa de Ucrania Con esa nueva revisión a la baja, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) estima que el mundo quemará este año solo un 3,4% más de crudo que en 2021.
La AIE calcula que la producción rusa de petróleo de este año caerá a mínimos de 2004
La OPEP cree que el consumo mundial de crudo solo subirá el 3,4% en 2022