El bloqueo financiero a Rusia lo sufren sobre todo... sus acreedores

Dice el ministro de Finanzas ruso, Anton Siluanov, que la situación del servicio de la deuda externa de su país, en impago técnico es en realidad una “farsa”. Tiene bastante razón, porque Moscú sigue recibiendo pingües ingresos del exterior por sus ventas de energía, y tiene dinero de sobra para pagar a sus acreedores, pero son los embargos occidentales los que le impiden canalizar esos pagos.

La duda es cuánto durará la guerra, y si la estructura de deuda rusa podrá reordenarse cuando acabe. Es lo que desean los acreedores, los que en la práctica sufren el bloqueo financiero de los aliados (de la OTAN). La política se parece cada vez más al teatro; y alguien tiene que pagar las entradas.