VUELVE A MARCARSE UN ‘ABRE LOS OJOS’
QUE LA GRAN VÍA SE QUEDE VACÍA ES ALGO QUE SOLO PASA CUANDO LOS RODAJES JUEGAN A HACER DE LAS SUYAS Y EN MADRID, DE TANTOS COMO HAY, LO IMPOSIBLE ESTÁ GARANTIZADO
Después de que la Madrid Film Office ofreciera asistencia a 557 proyectos audiovisuales en 2022 y a 397 en 2021, existe el riesgo de pensar que la capital ya está muy vista en pantalla. Nada más lejos de la realidad. Madrid es diverso en espacios, gentes y experiencias y podríamos decir que casi infinito a la hora de contar historias y de ambientarlas. La ciudad puede ser cualquier período histórico que quiera un guionista de El Ministerio del Tiempo, escenario perfecto para una comedia romántica a ritmo de musical o conseguir que una Gran Vía desierta nos haga enmudecer en Abre los ojos. Y si lo logró una vez, ¿por qué no lograrlo una segunda? Madrid ha vuelto a marcarse un Abre los ojos, aunque esta vez ha sido para el rodaje de Todos los nombres de Dios, un thriller dirigido por Daniel Calparsoro.
“Fue un gran trabajo de coordinación entre el equipo de la película y las diferentes áreas del Ayuntamiento implicadas. Se terminó encajando el rodaje de la secuencia en dos mañanas de domingo consecutivas, al considerarse la franja en la que podría tener menos afectación sobre el tráfico, los peatones, vecinos y los comercios”, explica Raúl Torquemada, Director de Madrid Film Office. El distrito Centro de Madrid atrae miradas. Tantas como el 35% de las solicitudes de rodaje anuales. De ahí, que trabajar en la descentralización sea uno de los principales objetivos de la institución.
Que los localizadores conozcan lo que pueden ofrecer los 21 distritos de la capital resulta esencial para “asegurar la sostenibilidad de la industria de los rodajes en el tiempo y fomentar una mayor convivencia de los mismos con las actividades de los vecinos”.
Para que estos futuribles escenarios gocen de una mayor visibilidad, desde Madrid Film Office han desarrollado un proyecto fotográfico para incluirlos en su catálogo de localizaciones y pondrán en marcha el proyecto ‘Rodando en 21 distritos’, con el que esperan fomentar la descentralización y promover mayor coordinación con los vecinos para que sean partícipes de estos procesos. Anticipan, también, que se dejará notar en el turismo de pantalla gracias a la capacidad del cine y de las series de convertir los espacios en los que se ruedan en lugares de interés.
“Es difícil predecir cuándo una localización va a convertirse en un lugar de interés turístico por este motivo (...) Pero, sin duda, fomentar una mayor distribución de los rodajes a lo largo y ancho del territorio municipal ayuda a generar un marco en el que esto puede darse en localizaciones hasta ahora menos conocidas”, creando nuevos flujos turísticos en una ciudad que, de momento, cuenta con siete folletos y mapas de rutas de cine y está preparando uno nuevo sobre la representación de los lugares del Paisaje de la Luz en el audiovisual.
Islabentura es un laboratorio de guion del Gobierno de Canarias que tiene como objetivo principal la creación de guiones de cine y televisión basados en localizaciones de Canarias”, define María José Manso, su creadora y directora.
Uno podría pensar que conoce algo de las islas Canarias gracias a lo mucho que las ha visto en pantalla. Sin embargo, lo más probable es que no sepa nada, por ejemplo, de Blanca Ascanio, la profesora republicana que llevó la cultura a los pueblos de La Gomera ni del paso de Agatha Christie por Las Palmas de Gran Canaria. Que una región aparezca en el cine o en la televisión no significa que se esté hablando de ella. Esa carencia en poner en valor las historias propias es lo que motivó a María José a crear islabentura en La Palma. Corría el año 2018 y ella ejercía como directora de la Film Commission de esta isla.
A finales de 2021, el Instituto Canario de Desarrollo Cultural se interesó por el proyecto y por la posibilidad de extenderlo a todo el archipiélago. Nacía islabentura Canarias, una iniciativa de este instituto adscrito a la Consejería de Educación, Universidades, Cultura y Deportes del Gobierno de Canarias, que se gestiona a través de la unidad Canary Islands Film.
En cada edición participan 14 personas, dos por isla: siete en la modalidad de largometraje y siete en la de serie. A los candidatos se les exige una mínima experiencia en la escritura de guion y, sobre todo, que tengan entre manos una buena historia canaria o, al menos, que “esté tan enraizada que sea imposible o muy complicado producirla en otro sitio”, cuenta María José.
El laboratorio, que está celebrando su segunda edición, tiene una duración de seis meses, durante los cuales los participantes viajan tres veces al archipiélago: la primera, para visitar la isla en la que ambientarán su historia y para familiarizarse con el equipo de tutores, que este año incluye nombres como los de Fernando León de Aranoa, Diana Rojo o Jordi Calafí; la segunda, para formarse en talleres específicos de guion; y la tercera, para celebrar reuniones con productoras nacionales e internacionales.
En la primera edición, recibieron 227 propuestas y, de los 14 finalistas, algunos ya están encontrando financiación. Es el caso de la directora y guionista Laura Pérez Gómez, responsable del largometraje Especies distintas que escribió en Islabentura con Virginia Yagüe como tutora. La historia, un drama de personajes que habla del derecho a empezar una nueva vida, se ambienta en La Gomera y ha llamado la atención de una productora valenciana. “Estamos en fase de desarrollo y la idea es presentarnos a más convocatorias y a las ayudas al cine para poder empezar la preproducción de la película”. Dice estar contenta y nerviosa, “pero con ganas, pues quiero dirigirla yo misma y es un reto difícil pero apasionante”.