TECNOLOGÍAS
Enfriamiento evaporativo y refrigeración hospitalaria
El funcionamiento de equipos como los condensadores evaporativos y las torres de enfriamiento se basa en un proceso natural que utiliza el agua como refrigerante y que se aplica para la transmisión a la atmósfera del calor excedente de diferentes procesos y máquinas térmicas. Sin embargo, la consideración de estos equipos como instalaciones con riegos de transmisión de legionela ha venido generando dudas entre los responsables del diseño y construcción de instalaciones socio-hospitalarias en torno a los problemas que la bacteria pudiera causar en personas inmunodeprimidas o en ancianos con cuadros de dolencias múltiples.
La bacteria de la legionela
El desconocimiento y la alarma social, a menudo injustificada, que gira en torno a las fuentes de transmisión de la bacteria Pneumophila Legionella ha puesto en cuestión unos equipos que son, sin duda, la mejor solución técnica y que, con el correcto mantenimiento y unas medidas de diseño implementadas por todos los fabricantes, eliminan el riesgo de transmisión de legionela. En este punto conviene recordar que, de igual forma que ha venido ocurriendo durante los últimos años, en 2017 no se han registrado casos de legionela vinculados a torres de refrigeración y equipos de condensación evaporativa. Las investigaciones de carácter ambiental y epidemiológico, así como las inspecciones efectuadas en las instalaciones de riesgo, han puesto de manifiesto la no vinculación entre los focos y este tipo de equipos. Es más, el hecho de que algunos de los brotes registrados el pasado año hayan estado vinculados a otros equipos de riesgo, como spas o al agua de red, han venido a confirmar una de las principales
demandas de AEFYT: exhaustivo control de la red de suministro de agua, ya que una colonia virulenta de Legionella Pneumophila accede a cualquier lugar con cierta concentración de agua a través de la red, por lo que el control de su origen es fundamental para evitar los brotes. Han sido varios los factores que han contribuido a esta situación:
• El cada vez mayor compromiso de instaladores y propietarios de estas instalaciones con el control, mantenimiento e inspección de las mismas, habiéndose acometido un considerable esfuerzo a lo largo de los últimos años para garantizar la seguridad y eficiencia de esta tecnología.
• El cambio de actitud experimentado por las administraciones autonómicas de Sanidad Ambiental, quienes han dejado de referirse a dichos equipos como únicos causantes de la proliferación de la bacteria y han comenzado a considerar
el resto de instalaciones de riesgo -fuentes públicas, sistemas de riego, spas, piscinas, vaporizadores, etc.- y, en consecuencia, a tomar medidas más apropiadas frente a este problema.
Funcionamiento y aplicaciones
Los equipos de enfriamiento evaporativo, utilizados para la condensación del gas refrigerante en las instalaciones frigoríficas, liberan el calor de condensación de las máquinas frigoríficas transfiriéndolo a la atmósfera mediante la evaporación de una reducida cantidad de agua. Este proceso se hace efectivo gracias al establecimiento del contacto entre el agua en circulación y una corriente de aire en un intercambiador de calor. El valor añadido de esta tecnología pasa por ser natural, sencilla, limpia, segura y económica y abarca tres grandes áreas: la socio-sanitaria, destinada a eliminar el riesgo de transmisión de legionela; la medioambiental, vinculada con la eficiencia energética; y, por último, la económica, gracias a la óptima relación que ofrecen entre coste (incluyendo instalación y mantenimiento) y consumo energético. En el primero de estos puntos, el objetivo en el diseño y el mantenimiento de los equipos de refrigeración evaporativa está enfocado a eliminar cualquier riesgo de transmisión de la bacteria Pneumophila Legionella. Esto se consigue, simplemente, con el cumplimiento de las exigencias de instalación y mantenimiento recogidas en R.D. 865/2003, de 4 de julio, sobre prevención de legionela. Su aplicación sería suficiente para garantizar la seguridad socio-sanitaria, pero los fabricantes de torres de refrigeración y condensadores evaporativos han ido más allá.
En la actualidad, todos los fabricantes de equipos de refrigeración con condensación evaporativa ofrecen eficaces sistemas de mantenimiento del agua que circula por las torres, así como de la limpieza y control de los mismos. Asimismo, los sistemas de protección que se incluyen en las propias instalaciones son cada vez más sofisticados, por lo que el riesgo es prácticamente inexistente.
En resumen, en el caso de las torres de refrigeración evaporativa, la solución no consiste en limitar la utilización de todos estos equipos e instalaciones, sino en dotar a ingenieros y propietarios de los protocolos y las herramientas necesarios para evitar la presencia de la bacteria, su proliferación y su difusión al ambiente, así como en realizar a lo largo de todo el año un mantenimiento adecuado, conforme establece la legislación.
En resumen, en la actualidad, el enfriamiento evaporativo constituye una tecnología segura que puede utilizarse con todas las garantías en instalaciones socio-sanitarias, complejos que, por otra parte, podrán también beneficiarse de las ventajas aportadas por estos equipos en materia de eficiencia energética y ahorro económico.