Foto histórica. TOULOUSE-LAUTREC. El espíritu de Montmatre
Montmartre marcó la vida y obra de Toulouse-Lautrec y es el escenario que define a la perfección la esencia de la bohemia parisina del siglo XIX y que recorre cada una de sus obras, como las que ahora se pueden ver en las salas de CaixaForum Madrid.
ES Uno de loS eSCenarIoS artÍStICoS MÁS eMBleMÁtICoS QUe Se ConoCen. la ConCentraCIón de talentoS QUe paSearon por SUS CalleS no Se pUede olVIdar Y SU leYenda Y legado eStÁ IrreMedIaBleMente UnIdo a la FIgUra de HenrI de toUloUSe-laUtreC. sin duda, fue el motor social y cultural que definió el estilo moderno y carácter bohemio de este artista único. ahora para explicarnos los puntos clave de esta relación, caixa forum Madrid rescata con imágenes destacadas y definitorias, un pedazo de ese ambiente cautivador del definido en su origen como el barrio de los pintores. Una forma muy especial de poner en sintonía la figura de Henri toulouse-lautrec a través de un nutrido grupo de sus pinturas más significativas, dibujos desconocidos, geniales carteles e ilustraciones con la producción de los artistas contemporáneos que también vivieron y se desarrollaron en el mágico parís de finales del siglo XiX.
MontMartre: centro GeoGrÁfico de la cUltUra del MoMento la vida que se vivió en ese lugar escribió parte de la historia contemporánea y los artistas que por allí desfilaron son la mayor prueba de ello. las calles, los cabarets y los cafés del barrio de Montmartre fueron escenario de una explosión creativa muy especial, marcada por la bohemia y la vanguardia de la mano de jóvenes artistas e intelectuales que se encargaron de desafiar todo aquello que había estado establecido hasta el momento. a la cabeza de esta especial lista, encontramos a Henri de toulouse-lautrec (albi, 1864 - château Malromé, 1901) y también a otros geniales artistas como Vincent van gogh, Jean-louis Forain, t. a. Steinlen, pierre Bonnard o Édouard Vuillard que fueron piezas fundamentales en la formación y florecimiento de un movimiento, sin duda, rompedor que se construyó al margen de la burguesía.
el poder transformador de este barrio es único y su huella en nuestro arte y en el momento vivido, también lo es. en 1880, Montmartre era considerada una zona marginal y peligrosa apartada de parís, pero que empezó a atraer a numerosos jóvenes creadores. los artistas Henri de toulouse-lautrec, paul Signac, pierre Bonnard y Henri-gabriel Ibels,
los intérpretes Aristide Bruant e Yvette Guilbert, los escritores Émile Goudeau, Alphonse Allais y Alfred Jarry, y los músicos Erik Satie, Vincent Hyspa y Gustave Charpentier se sintieron atraídos por el poder de sus calles y su ambiente y se mudaron allí. Básicamente, todos ellos necesitan una opción que les permitiera gastar poco para vivir, además de trabajar en el París más bohemio del momento y evitar el, para ellos denostado, centro burgués de la capital francesa. Montmartre cumplía aquellas características. Así que se convirtió en el denominador común geográfico de muchos artistas, que contribuyeron activamente a definir la estética vanguardista de la época. Todo lo que allí se vivía pasó a ser una inagotable fuente de inspiración.
Los cabarets, los teatros, los cafés concierto y los circos eran visita obligada para todos ellos y las gentes que encontraban contaban parte de su historia. No sólo asistieron a los espectáculos y participaron en ellos, sino que empatizaron con los vagabundos o las prostitutas, y se veían a sí mismos al margen de la sociedad establecida. El lado más oscuro de la vida de fin de siècle quedó plasmado en la obra de numerosos talentos. Toulouse-Lautrec representa una figura clave para enlazar a los artistas e intelectuales que situaron Montmartre en el punto de mira de la transgresión y la vanguardia de finales de siglo.
Así la exposición, Toulouse-Lautrec y el espíritu de Montmartre, que podrá visitarse en Madrid del 20 de febrero al 19 de mayo, consta de más de 350 obras que incluyen préstamos internacionales de colecciones tanto públicas como privadas, y representa un bello viaje por el París bohemio de entre siglos.
Una muestra totalmente multidisciplinar que pretende dejar al descubierto el papel fundamental que el espíritu de Montmartre desempeñó en el desarrollo del arte moderno, y así pone el acento en la manera en la que Toulouse-Lautrec y sus contemporáneos influenciaron la evolución de la producción artística efímera: carteles, ilustraciones, impresiones y diseños, que expandieron a nuevos públicos el espíritu bohemio y las creaciones artísticas. Todo un lujo para nuestra historia.