UNO DE LOS LUGARES MÁS EXTRAÑOS DE EGIPTO
Uno de los centros mineros más importantes del Imperio Medio de Egipto, en concreto, el Wadi el-Hudi, situado en el desierto oriental egipcio (al este de Asuán), puede ser considerado uno de los más enigmático de Egipto, ya que contiene100 inscripciones ocultas y desconocidas hasta la fecha. Estas se suman a las más de 150 descubiertas en campañas anteriores.
Este enclave se caracteriza por albergar diversos asentamientos fortificados, en condiciones muy óptimas, además de minas especialmente de amatista (un material que fue muy popular en Egipto hace unos 3.900 años), oro, cobre y granito que fueron explotadas desde el Paleolítico hasta la época romana.
También junto a las minas se constituyeron distintos asentamientos, en los que vivían los trabajadores de las minas. Y ha sido aquí donde han aparecido las inscripciones talladas en la roca. Realmente se desconoce si se trataba de un trabajo que realizaban por voluntad propia o, por el contrario, si era una zona de trabajo para esclavos, ya que se sabe que existía una guardia armada para la protección de la zona. Quizá por el valor del material extraído o para evitar la fuga de exclavos, si es que ese fuera el caso. También se han encontrado inscripciones en 14 estelas y 45 ostraca (trozos de cerámica).
Entre los hallazgos realizados destaca también una extraña estela, datada hace 3.400 años, escrita por un alto funcionario llamado Usersatet, virrey de Kush (una región al sur de Egipto). Habrá que esperar a que estas traducciones arrojen luz sobre los misterios de Wadi el-Hudi.