ENTREVISTA A: JAVIER RAMOS EL VIEJO OESTE

LO QUE NO NOS CONTÓ LA INDUSTRIA DE HOLLYWOOD Y LA LITERATURA SOBRE EL SALVAJE OESTE, SUS MITOS, LEYENDAS Y PERSONAJES NOS LO CUENTA JAVIER RAMOS EN SU ÚLTIMO LIBRO. "MITOS, LEYENDAS Y TESOROS DEL SALVAJE OESTE" ES EL TÍTULO BAJO EL QUE EL ESCRITOR NOS SUMERGE EN EL APASIONANTE MUNDO DE ESTAS TIERRAS, INICIALMENTE IGNOTAS Y LEJANAS HABITADAS POR TRIBUS INDÍGENAS, HACIA LAS QUE PARTIERON CIENTOS DE HOMBRES Y MUJERES, INTRÉPIDOS EXPLORADORES Y PERSONAJES CON UN PASADO OSCURO PARA EMPRENDER UNA NUEVA VIDA.

EL FAR WEST FUE UNA ÉPOCA RUDA DE LA HISTORIA DE LOS ESTADOS UNIDOS, PERO TAMBIÉN UNA MANERA DE VIDA QUE FORJÓ LA PERSONALIDAD DEL PAÍS MÁS PODEROSO DEL MUNDO CONTEMPORÁNEO ENTRE FINALES DEL SIGLO XIX Y PRINCIPIOS DEL XX. El Salvaje Oeste sentó las bases del espíritu de frontera de un país que aprendió a crecerse con las dificultades, a innovarse constantemente y a mantener un esfuerzo orientado al progreso. Con "Mitos, leyendas y tesoros del Salvaje Oeste" (Modus Operandi), su autor, Javier Ramos, pretende acercar al lector al apasionante mundo de aquel momento, en especial a desmitificar los tópicos que nos ha vendido Hollywood y la literatura, a descubrir los hechos inauditos, los tesoros perdidos o los grandes misterios que aún quedan sin resolver… 1. ¿Quién fue realmente Billy el Niño?

Un pistolero que vivió rápido, murió joven y dejó un bonito cadáver. Antes de que fuera abatido por Pat Garrett (tal y como recoge la versión oficial), asegura la leyenda que asesinó a 21 hombres con apenas 21 años (solo 9 de manera probada). Pero nuestro protagonista no fue más que un hombre de su tiempo en un territorio sin ley, que nunca mató en vano… No era un ángel, pero tampoco el demonio que pintaba la prensa. Antes de forjar su mito, Billy era una persona muy educada, que respetaba a los ancianos y a las damas, generoso, con carisma, hablaba español, cortés, buen lector… aunque temperamental y sabía cómo manejar un arma. Cuando se enfadaba era un peligro… Y tenía mal perder. Si le provocaban, ahí estaba. Las malas amistades también influyeron en que cayera en el lado oscuro.