LA CONFERENCIA TEHERÁN DE
1943, EL AÑO QUE LA SEGUNDA GUERRA MUNDIAL CAMBIÓ SU RUMBO
PESE A QUE LA SEGUNDA GUERRA MUNDIAL HABÍA COMENZADO EN 1939, LOS TRES GRANDES LÍDERES DE LOS PAÍSES ALIADOS, EL PRESIDENTE ESTADOUNIDENSE FRANKLIN DELANO ROOSEVELT, EL PRIMER MINISTRO BRITÁNICO WINSTON CHURCHILL Y EL PRIMER MINISTRO SOVIÉTICO JOSEPH STALIN, NO SE HABÍAN REUNIDO. EL PRIMER ENCUENTRO, QUE PASARÍA A LA HISTORIA, SE CELEBRÓ CASI CUATRO AÑOS DESPUÉS, ENTRE EL 28 DE NOVIEMBRE Y EL 1 DE DICIEMBRE DE 1943, Y EN UN LUGAR SORPRENDENTE: TEHERÁN, LA CAPITAL DE IRÁN.
TAN SOLO UNOS DÍAS ANTES, ROOSEVELT, CHURCHILL Y CHIANG KAI-SHEK, LÍDER MÁXIMO DE LA REPÚBLICA DE CHINA, SE HABÍAN REUNIDO EN LA PRIMERA CONFERENCIA DE EL CAIRO, LLAMADA TAMBIÉN SEXTANT, QUE SE CELEBRÓ EN LA CAPITAL EGIPCIA DEL 22 AL 26 DE NOVIEMBRE DE 1943. El tema central era decidir cómo debían actuar los aliados contra Japón, que en aquella época aún tenía bajo su control un buen número de islas del Pacífico y varios territorios continentales, como Manchuria, que China reclamaba como suyos. Así, los aliados se comprometieron a seguir luchando contra el país nipón, que desde el Pacto Tripartito de 1940 se había convertido en una de las potencias del Eje, junto a la Alemania nazi y la Italia fascista –posteriormente se unirían otras naciones, como Bulgaria, Rumanía, Hungría y Yugoslavia.
Además, en 1943, el ejército de Hitler y el bando del Eje habían sufrido importantes reveses que dieron confianza a los aliados para reunirse y fijar estrategias, con el fin de ganar la guerra y estudiar cómo actuarían después…
¿EL DECLIVE DE LAS FUERZAS ALEMANAS?
Por un lado, en el frente oriental cayó el Sexto Ejército del general Friedrich von Paulus, que durante meses se había enfrentado al Ejército Rojo en Stalingrado. El 31 de enero, Paulus se rindió, desobedeciendo a Hitler. El frío polar, la falta de alimentos y la fortaleza del enemigo le llevaron a tomar esa insólita decisión. Aquello supuso para el Tercer Reich la pérdida de su mayor ejército. En cuanto a vidas humanas, las cifras eran terribles: se calcula que fallecieron unos 300.000 soldados alemanes (muchos de ellos tras años de cautiverio), además de decenas de miles de rumanos, húngaros e italianos; por el bando soviético, la cifra de soldados fallecidos llegaba al medio millón, a los que había que sumar cerca de 300.000 civiles.
Además, durante julio y agosto de 1943, las fuerzas alemanas fueron también duramente golpeadas en las batallas alrededor de los salientes de Kursk, Orel y Kharkov, a manos de las fuerzas soviéticas
Por otro lado, en el Mediterráneo, el 10 de julio, Mussolini, el líder de los fascistas italianos, aliado de Hitler, tuvo que enfrentarse a un ataque masivo de los aliados en Sicilia, con el objetivo de neutralizar el poderío de las fuerzas del Eje en el Mediterráneo. Aquello supuso una dura derrota para el Duce, que terminó siendo arrestado por orden del rey Víctor Manuel III. El monarca temía la posible invasión aliada de la Italia continental. No lo consiguió. Por un lado, Hitler invadió el norte del país, creando la República Social Italiana y liberando a Mussolini; en el sur, el rey firmó un tratado de paz con los aliados el 8 de septiembre.
Así, en este contexto de franco retroceso para el Eje, los más importantes líderes
EL OBJETIVO DE LA CONFERENCIA DE TEHERÁN ERA DECIDIR CÓMO LLEVAR A CABO UNA ESTRATEGIA MILITAR POR PARTE DE LAS NACIONES ALIADAS CONTRA EL EJE FORMADO POR LA ALEMANIA NAZI, LA ITALIA FASCISTA Y EL JAPÓN IMPERIAL.
del bando aliado, los Tres Grandes (The Big Three), Roosevelt, Stalin y Churchill, decidieron organizar una conferencia en Teherán, la capital de Irán –que hasta 1935 aún era Persia–. El anfitrión fue
Mohammad Reza Pahlaví, shah de Irán desde 1941 hasta 1979, cuando fue derrocado durante la revolución islámica dirigida por el ayatolá Jomeini. PUNTOS A TRATAR
El objetivo de esta reunión, que pasó a la Historia como la Conferencia de Teherán –aunque el nombre en clave era Eureka– era decidir cómo llevar a cabo una estrategia militar por parte de las naciones aliadas contra el eje formado por la Alemania nazi, la Italia fascista y el Japón imperial, y dar un giro a la Segunda Guerra Mundial. Además, se tomaron decisiones que tendrían importantes consecuencias durante los años siguientes.
Uno de los principales puntos que se trataron fue la necesidad de organizar una invasión de la Francia ocupada por los nazis. Los soviéticos eran los más interesados en que esto sucediera, ya que, hasta ese momento, el Ejército Rojo era el único que estaba luchando contra los nazis en tierra. Stalin, por lo tanto, veía necesario abrir un segundo frente.
De este modo, se decidió que Inglaterra y Estados Unidos lanzarían una ofensiva militar masiva en Normandía, con el objetivo de abrir una bre
UNO DE LOS PRINCIPALES PUNTOS QUE SE TRATARON FUE LA NECESIDAD DE ORGANIZAR UNA INVASIÓN DE LA FRANCIA OCUPADA POR LOS NAZIS. LOS SOVIÉTICOS ERAN LOS MÁS INTERESADOS. STALIN VEÍA NECESARIO ABRIR UN SEGUNDO FRENTE.
cha, recuperar Francia e ir poco a poco avanzando hacia Alemania. Si bien esta operación se venía planeando desde varios años antes –ya se vislumbró en la conferencia de Casablanca de enero de 1943, en la que estuvieron presentes Roosevelt, Churchill, Charles de Gaulle y Henri Giraud; no asistió Stalin, aunque estaba invitado, porque estaba en plena batalla de Stalingrado–, fue entonces cuando comenzó a organizarse lo que terminaría conociéndose como Operación Overlord. La batalla de Normandía dio comienzo el 6 de junio de 1944, aunque en la conferencia de Teherán se había decidido que fuese en mayo. Los soviéticos lanzaron una gran ofensiva contra los alemanes el 22 de junio de 1944 (Operación Bagration).
Finalmente, los líderes acordaron que los estados mayores de las tres potencias debían mantenerse en estrecho contacto entre sí respecto a las inminentes operaciones en Europa. En particular, se acordó que un plan encubierto para engañar al enemigo acerca de estas operaciones debería ser concertado entre el personal involucrado.
Por otor lado, Stalin se comprometió a lanzar una ofensiva desde oriente contra Japón para desviar la atención de los alemanes ante la ofensiva aliada en el norte de Francia, además de declarar la guerra a Japón. A cambio, Roosevelt cedió a las demandas de Stalin, que quería las islas Kuriles y la mitad sur de Sakhalin, y el acceso a los puertos libres de hielo de Dairen (Dalian) y Port Arthur (puerto de Lüshun), ubicados en la península de Liaodong, en el norte de China.
También conversaron sobre el destino de Europa del Este y Alemania en el periodo de posguerra. Stalin hizo hincapié en que se revisara la frontera oriental de Polonia con la Unión
LA BATALLA DE NORMANDÍA DIO COMIENZO EL 6 DE JUNIO DE 1944, AUNQUE EN LA CONFERENCIA DE TEHERÁN SE HABÍA DECIDIDO QUE FUESE EN MAYO.
para que coincidiera con la línea establecida por el secretario de Relaciones Exteriores británico, Lord Curzon, en 1920. Y se acordó trasladar la frontera germano-polaca a los ríos Oder y Neisse, que se formalizó en la posterior Conferencia de Potsdam, llevada a cabo en el año 1945.
En Teherán también se acordó que las repúblicas de Lituania, Letonia y Estonia serían reincorporadas a la Unión Soviética, tras un referéndum en el que se consultaría a la ciudadanía de cada uno de estos países, aunque Stalin matizó se llevaría a cabo según “la constitución soviética”, sin intervenciones internacionales en dichas elecciones.
Por otro lado, se decidió que los partisanos yugoslavos debían ser apoyados con suministros y equipos soviéticos, y también por operaciones de comando, ya que se creía que estaban cooperando con los alemanes ocupantes en lugar de luchar contra ellos. Los partisanos comunistas bajo Tito tomaron el poder en Yugoslavia cuando los alemanes se retiraron de los Balcanes.
Es decir, en la práctica, a cambio de la cooperación de la Unión Soviética para acabar con la Alemania nazi y, posteriormente, con sus aliados japoneses, Estados Unidos y Gran Bretaña aceptaban la dominación comunista de Europa del Este. Esto, como terminó viéndose, tendría importantes consecuencias en las décadas posteriores al fin de la Segunda Guerra Mundial.
CONSECUENCIAS FUTURAS
Se habló también sobre Irán y Turquía. Por un lado, las tres potencias se comprometieron a apoyar al shah. Dos años antes, entre el 25 de agosto de 1941 y el 17 de septiembre de ese mismo año, había tenido lugar la Operación Countenance, con el objetivo de asegurar los pozos petrolíferos iraníes, que garantizaban el suministro de las fuerzas soviéticas que luchaban contra Hitler. Aunque Irán era supuestamente neutral, su monarca por aquel entonces, Reza Pahlaví, se mostraba cercano a las potencias del Eje, por lo que terminó siendo depuesto durante esta operación, nombrándose heredero a su hijo.
Finalmente, los tres líderes emitieron una declaración agradeciendo al Gobierno iraní por su ayuda en la guerra contra Alemania y prometieron darle ayuda económica durante y después de la guerra, además de respetar su soberanía, independencia e integridad territorial. Eso sí, durante el resto de la contienda, Irán estuvo ocupada por Gran Bretaña y la Unión Soviética. Todo esto, sin duda, influyó en el devenir posterior tanto de Irán como de toda la región de Oriente Medio.
Respecto a Turquía, los aliados querían que este país entrara en la guerra junto a ellos, contando especialmente con el apoyo de la Unión Soviética, en caso de que, como era más que probable, Bulgaria, aliada del Eje, declarase la guerra a Turquía. Así pues, en agosto de 1944, Turquía rompió relaciones con Alemania. En febrero de 1945, Turquía declaró la guerra a Alemania y Japón, entrando de lleno en la SeSoviética
A CAMBIO DE LA COOPERACIÓN DE LA UNIÓN SOVIÉTICA PARA ACABAR CON LA ALEMANIA NAZI, ESTADOS UNIDOS Y GRAN BRETAÑA ACEPTARON LA DOMINACIÓN COMUNISTA DE EUROPA DEL ESTE.
gunda Guerra Mundial, del lado de los aliados, aunque fue más bien un movimiento simbólico que permitió a Turquía unirse a las futuras Naciones Unidas. Posteriormente, ya concluida la contienda, en plena Guerra Fría, Estados Unidos ayudó a Turquía tanto en la Guerra Civil griega, en la que estaban implicados los turcos, como en su enfrentamiento contra la URSS por las bases que militares que los comunistas querían colocar en el Bósforo.
Además, fue en esta conferencia donde se acordó que Alemania, tras la guerra, sería dividida en zonas, que estarían ocupadas, controladas y gobernadas por diferentes países aliados, y que se estudiaría por la Comisión Consultiva Europea dicha división territorial.
Por último, se habló de la cooperación internacional de países para evitar otra contienda de este tipo, y fueron Roosevelt y Stalin quienes discutieron en privado la composición de las Naciones Unidas. Y fue durante la Conferencia de Ministros de Relaciones Exteriores de Moscú en octubre y noviembre de 1943 cuando Estados Unidos, Gran Bretaña, China y la Unión Soviética firmaron una declaración de cuatro potencias para la creación de una organización internacional general para garantizar la “paz y la seguridad internacional”.
EL DESENLACE FINAL
Finalmente, la Conferencia de Teherán se cerró el 1 de diciembre de 1943 con demostraciones externas de amistad mutua y unidad de propósito de los Tres Grandes, y el compromiso común de asestar los últimos golpes fatales al régimen nazi y a Japón.
El principio del fin llegaría en el verano de 1944 con la Operación Overlord y el desembarco de Normandía, más o menos según lo planeado en esta reunión.
El presidente estadounidense, Roosevelt, vivió para verlo, pero su muerte, que se produjo en abril de 1945, le impidió presenciar y ayudar a dar forma a la creación de las Naciones Unidas, en cuya fundación tuvo mucho que ver. Tampoco pudo ver cómo terminó la guerra en el Pacífico, tras el lanzamiento de las dos primeras bombas atómicas contra las ciudades niponas de Hiroshima y Nagasaki en agosto de 1945.
Aunque esta conferencia fue esencial para que los aliados acabasen con el poder ejercido por el Tercer Reich, también contribuyó al aumento de la influencia soviética en la Europa de Este, a la instauración del Telón de Acero y al nacimiento de una nueva guerra, en este caso más bien psicológica: la Guerra Fría.
EN ESTA CONFERENCIA SE ACORDÓ QUE ALEMANIA, TRAS LA GUERRA, SERÍA DIVIDIDA EN ZONAS, QUE ESTARÍAN OCUPADAS, CONTROLADAS Y GOBERNADAS POR DIFERENTES PAÍSES ALIADOS.