ANTONIO PIÑERO
EN BUSCA DEL JESÚS HISTÓRICO
EL HISTORIADOR ÓSCAR FÁBREGA, COLABORADOR HABITUAL DE CLÍO HISTORIA, ENTREVISTA AL DOCTOR EN FILOLOGÍA CLÁSICA Y LICENCIADO EN FILOSOFÍA Y EN FILOLOGÍA BÍBLICA ANTONIO PIÑERO, UNO DE LOS PRINCIPALES ESPECIALISTAS A NIVEL INTERNACIONAL EN LA BÚSQUEDA DEL JESÚS DE LA HISTORIA. EL MOTIVO, LA PUBLICACIÓN DE UNA OBRA TITULADA LOS LIBROS DEL NUEVO TESTAMENTO, UNA EDICIÓN MERAMENTE HISTÓRICA, EFECTUADA CON CRITERIOS ESTRICTAMENTE ACADÉMICOS, NO CONFESIONALES, Y SIN NINGUNA TENDENCIA RELIGIOSA PREVIA; UNA OBRA DE CONSULTA MONUMENTAL IMPRESCINDIBLE PARA TODO AQUEL INTERESADO EN CONOCER QUÉ PODEMOS SABER REALMENTE SOBRE JESÚS DE NAZARET Y LA IGLESIA PRIMITIVA A PARTIR DE LAS OBRAS NEOTESTAMENTARIAS.
EL HISTORIADOR ÓSCAR FÁBREGA, COLABORADOR HABITUAL DE CLÍO HISTORIA, ENTREVISTA AL DOCTOR EN FILOLOGÍA CLÁSICA Y LICENCIADO EN FILOSOFÍA Y EN FILOLOGÍA BÍBLICA ANTONIO PIÑERO, UNO DE LOS PRINCIPALES ESPECIALISTAS A NIVEL INTERNACIONAL EN LA BÚSQUEDA DEL JESÚS DE LA HISTORIA. EL MOTIVO, LA PUBLICACIÓN DE UNA OBRA TITULADA "LOS LIBROS DEL NUEVO TESTAMENTO", UNA EDICIÓN MERAMENTE HISTÓRICA, EFECTUADA CON CRITERIOS ESTRICTAMENTE ACADÉMICOS, NO CONFESIONALES, Y SIN NINGUNA TENDENCIA RELIGIOSA PREVIA; UNA OBRA DE CONSULTA MONUMENTAL IMPRESCINDIBLE PARA TODO AQUEL INTERESADO EN CONOCER QUÉ PODEMOS SABER REALMENTE SOBRE JESÚS DE NAZARET Y LA IGLESIA PRIMITIVA A PARTIR DE LAS OBRAS NEOTESTAMENTARIAS.
LOS LIBROS DEL NUEVO TESTAMENTO, EDICIÓN DE ANTONIO PIÑERO. PARA QUE NUESTROS LECTORES COMPRENDAN LA ENVERGADURA DEL PROYECTO, CUÉNTENOS. ¿EN QUÉ CONSISTE? ¿QUÉ AUTORES HAN COLABORADO EN ESTE AMBICIOSO PROYECTO?
–Se trata de una nueva traducción (que tiene relativamente poca importancia, ya que abundan las versiones en el mercado religioso) de todo el Nuevo Testamento, ciertamente, pero ante todo es un comentario/explicación de cada una de las secciones de las 27 obras de este conjunto. No existe en ese mercado, ciertamente en lengua española, francesa o italiana, y probablemente tampoco en inglés y alemán, un comentario explicativo, breve, compacto, manejable de todos los libros del Nuevo Testamento, dividido por secciones. En los Evangelios, sobre todo, responde a las preguntas, muchas veces repetidas, sobre la historicidad, o no, de los dichos y hechos de Jesús. Somos cinco colaboradores. Tres principales que se han ocupado de presentar e introducir cada uno de los libros del Nuevo Testamento para que se entiendan bien. Son obras escritas hace dos mil años y no se entienden con facilidad. Se puede comprender aparentemente las palabras, pero lo que se quiere decir en el fondo se escapa a menudo. ¿Puede un lector de hoy entender el castellano del Cantar del Mío Cid sin ayuda? ¡De ningún modo! Pues el Nuevo Testamento tampoco.
Los tres primeros (catedráticos de griego o latín o de historia de la filosofía antigua) llevan toda la carga de la explicación de los libros del Nuevo Testamento. Los traductores, dos solamente, y no de todas las obras) son igualmente profesores de griego de la Universidad y sirven, además, de ojo crítico revisor de lo que se explica.
¿EN QUÉ PUEDE CONTRIBUIR ESTA NUEVA OBRA A LOS LECTORES INTERESADOS EN EL JESÚS HISTÓRICO? ¿CUÁLES SON SUS PRINCIPALES NOVEDADES?
–Creo que muchísimo, ya que el interés de esta edición de los libros del Nuevo Testamento está orientada exclusivamente a mostrar los resultados actuales de la investigación independiente sobre el Jesús de la historia, no sobre el “Cristo celestial”, el “Cristo de la fe”, o si se quiere sobre esa mezcla de Jesús y de Cristo, “Jesucristo”, que es parte historia y parte pura teología. Y diría que de este Jesús de la historia sabe muy poco el cristiano corriente. Las principales novedades comienzan por el orden de la presentación de los libros del Nuevo Testamento para su lectura. Es un orden cronológico que ayuda mucho a entender. Por eso el lector se encuentra primero con las siete cartas auténticas de Pablo y luego con los tres primero evangelios, cuyos autores están claramente influidos por la teología de Pablo a la hora de presentar a Jesús.
Otros ejemplos de novedades que resultan de la investigación puramente histórica, no literaria: al menos un tercio de los milagros de Jesús son pura ficción novelesca; se han perdido todos los originales del Nuevo Testamento y no hay manera de recuperarlos; no fueron los judíos los causantes de muerte de Jesús; Jesús era un judío a carta cabal y que por ejemplo, no tenía ni la menor idea de Trinidad; jamás pudo ser Jesús el fundador del cristianismo; o que este tardó más de 400 años en aclararse cuál era su naturaleza; o que no tenemos documento alguno, ¡ninguno!, sobre cómo se formó el Nuevo Testamento. O que jamás la Iglesia ha podido pronunciarse sobre cuál fue el texto inspirado del Nuevo Testamento, porque si en los manuscritos del hasta el siglo XIV más o menos (en torno a los 5.250) hay unas 500.000 variantes… ¿Quién puede decidirse entre ellas? Y hay más novedades de orden puramente histórico que no es posible resumir de una tacada.
¿A QUÉ SE REFIERE CUANDO COMENTA QUE LA OBRA PROPONE UN NUEVO PARADIGMA QUE SUPONE ROMPER CON LA FORMA EN LA QUE, HASTA AHORA, SE HAN LEÍDO LAS OBRAS DEL NUEVO TESTAMENTO?
–Me refiero a que hasta ahora el lector de temas religiosos en español lee un Nuevo Testamento desde la óptica de la teología, no desde el punto de vista de la Historia. La lectura de este libro supone dar una vuelta de 180 grados. El contenido del Nuevo Testamento aparece explicado en esta obra con el mismo intento de objetividad que si se estuviera estudiando críticamente la Historia de Roma, de Tito Livio. Por ello, los libros del Nuevo Testamento están sometidos al mismo proceso de tratamiento crítico deparado a cualquier otro texto de la Antigüedad grecolatina, porque si bien los libros del Nuevo Testamento constituyen los escritos fundacionales del cristianismo que resultó vencedor en los primeros siglos de su historia, son ante todo un jalón importante de la literatura griega, así como una obra medular del acervo de la cultura universal.
El planteamiento puramente histórico y de crítica literaria, apoyado en el sustrato de la investigación académica, puede arrojar como resultado una mirada relativamente nueva sobre los libros del Nuevo Testamento, que podría incluso conducir a un redescubrimiento de estas obras por parte del lector, independientemente de sus creencias.
El supuesto subyacente a la obra es que la correcta comprensión del sentido de textos escritos hace casi dos milenios exige una labor explicativa basada en conocimientos históricos y literarios. De ahí las amplias introducciones y notas de esta edición, que tienen como objeto cubrir todas las dimensiones filológicas, literarias, históricas y religiosas, relevantes para la comprensión del texto, es decir, cómo este se ha transmitido, con las variantes textuales más importantes, aclaración de vocablos y conceptos, existencia de paralelos, exposición de problemas interpretativos o discusiones sobre la historicidad de dichos y hechos.
¿POR QUÉ ES TAN DIFERENTE EL CUARTO EVANGELIO, TRADICIONALMENTE ATRIBUIDO AL APÓSTOL JUAN, DE LOS TRES EVANGELIOS SINÓPTICOS? ¿SE ALEJA DE LA POSIBLE REALIDAD HISTÓRICA DEL PERSONAJE?
–Porque ese Evangelio es una enmienda a la totalidad de las “biografías” de Jesús escritas por los autores anteriores (que no sabemos en verdad quiénes son en realidad, pero que se llaman comúnmente Marcos, Mateo y Lucas). El autor, o mejor autores, del Cuarto Evangelio no afirman que el Jesús de esos evangelistas sea falso, pero sí que es superficial, “material”. Él, o ellos, van a presentar a los lectores el Jesús profundo, místico, espiritual, encarnación en la historia humana de la Palabra Divina eterna. Naturalmente para eso recogen otras tradiciones de Jesús, las interpretan bajo esa luz de la mística e “inventan” palabras nuevas de Jesús que expresan su verdadera personalidad… según ellos. Y, naturalmente también, el Jesús resultante es muy distinto al de los tres evangelistas anteriores. Pero ese no es un Jesús histórico, sino la parte mística profunda del Jesús histórico.
USTED LE DA MUCHA IMPORTANCIA, TANTO EN ESTA OBRA COMO EN OTRAS ANTERIORES, AL LIBRO DEL APOCALIPSIS ASÍ COMO A OTROS LIBROS SIMILARES CONSIDERADOS APÓCRIFOS. ¿POR QUÉ SON TAN IMPORTANTES ESTAS OBRAS PARA ENTENDER AL JESÚS DE LA HISTORIA?
1. El Apocalipsis de Juan es importantísimo para saber qué pensaban del Imperio romano los judeocristianos que forman el grupo de su autor. Lo dibujan con tintes muy negros; afirman que va ser destruido enseguida; que va a haber sobre la tierra un reino del Mesías Jesús durante mil años (ideas bastante parecidas a las del Jesús histórico sobre la primera parte, terrena, del reino del Mesías), y que luego vendrá el paraíso definitivo, que será solo para los seguidores de Jesús, y que durará por siempre jamás. Estas doctrinas han sido luego ignoradas prácticamente por la Iglesia. El Apocalipsis no se comenta casi nunca en las facultades de teología católicas.
2. Respecto a los Evangelios apócrifos, he afirmado siempre que no valen para reconstruir al Jesús histórico, sino solo para deducir de ellos la piedad popular. Son tres las razones. La primera, porque dependen en casi todos los casos de material anterior, en concreto de los evangelios canónicos. Segunda, porque están escritos a partir de un centenar de años después de muerte de Jesús, sin que se pudieran consultar archivos o algo semejante, simplemente porque no existían. Y tercero, porque su tono es absolutamente legendario, llena de “noticias”, descripción de escenas y diálogos totalmente fabulosos y legendarios.
Ni siquiera el Evangelio de Tomás, gnóstico, es válido para esa reconstrucción. Esta solo se logra estudiando con lupa crítica, a fondo, con métodos de pura Historia, los primeros evangelios, cronológicamente hablando que se compusieron. Y estos resultan ser los del Nuevo Testamento. No hay otros anteriores.
UNA PREGUNTA ALGO MÁS GENERAL. ¿CREE QUE EN GENERAL EXISTE DESCONOCIMIENTO POR PARTE DE LA POBLACIÓN SOBRE LO QUE LOS ESTUDIOSOS HAN PLANTEADO ACERCA DEL JESÚS DE LA HISTORIA?
–Totalmente. Las iglesias (de todos los colores, católicas, protestantes de muchas ramas, ortodoxos) han expandido su visión, cargada de pura teología, de Jesús de Nazaret. Salvo algún que otro lector avisado, la inmensa mayoría solo conoce la versión de “Jesucristo”, ofrecida por esas iglesias, pero no la realidad del Jesús de la Historia. Y cuando se le presenta tal cuadro en un libro como este, queda asombrado.
"LOS EVANGELIOS APÓCRIFOS NO VALEN PARA RECONSTRUIR AL JESÚS HISTÓRICO, SINO SOLO PARA DEDUCIR DE ELLOS LA PIEDAD POPULAR".