LA CARTA DE ARRAS
19 DE JULIO DE 1074 ES LA FECHA QUE, EL VISITANTE POCO DISTRAÍDO QUE PRESTE ATENCIÓN A LOS DETALLES, PODRÁ CONTEMPLAR A TRAVÉS DEL CRISTAL DE UNA DE LAS VITRINAS DE LA CATEDRAL DE BURGOS ESCRITO EN UN PERGAMINO. SE TRATA DE UN CÓDICE INTEGRADO DENTRO DEL CARTULARIO CIDIANO: EL MANUSCRITO QUE CERTIFICA LA CARTA DE ARRAS NUPCIAL ENTRE DON RODRIGO Y DOÑA JIMENA, HALLADO EN 1596 POR RUIZ DE ULIBARRI EN EL ARCHIVO DE LA CATEDRAL. EN DICHA CARTA, RUBRICADA POR
LOS DESPOSADOS “EN EL NOMBRE DE LA SANTA E INDIVISIBLE TRINIDAD, PADRE, HIJO Y ESPÍRITU SANTO, CRIADOR DE TODAS LAS COSAS VISIBLES E INVISIBLES, UN SOLO DIOS ADMIRABLE Y REY ETERNO, COMO SABEN MUCHOS, Y POCOS PUEDEN DECLARAR”; DON RODRIGO CEDÍA LA MITAD DE SU FORTUNA –QUE EN ESTE
CASO SE EXTENDÍA A TRES VILLAS, MÁS DE TREINTA Y CUATRO HEREDADES EN TANTAS LOCALIDADES Y UN MONASTERIO– A SU ESPOSA, SIEMPRE Y CUANDO ESTA, SI ENVIUDASE, NO CONTRAJESE MATRIMONIO DE NUEVO.
SEGURAMENTE A DOÑA JIMENA DÍAZ (¿?-1104) LE BASTARA EL RELATO DE UNA SOLA DE SUS GESTAS
PARA DEJARSE CAUTIVAR POR EL IMBATIBLE CAUDILLO CASTELLANO, CUYA “CONQUISTA”, SEGÚN SE MENCIONA EN LA CARTA DE ARRAS, CULMINA LA FECHA CITADA DEL AÑO 1074. SEGÚN CONSTA EN EL CÓDICE, LA DESPOSADA NO ERA UNA DONCELLA CUALQUIERA; SU ASCENDENCIA
SE EMPARENTABA CON EL LINAJE MONÁRQUICO: SOBRINA SEGUNDA DEL MONARCA, ERA HIJA DE DOÑA CRISTINA Y DON DIEGO RODRÍGUEZ, CONDES DE OVIEDO Y BIZNIETA DE ALFONSO V DE LEÓN.
EN ROJAS LETRAS VISIGÓTICAS, SUBSCRIBEN COMO PRINCIPALES FIADORES O TESTIGOS DE ESTA CARTA DE ARRAS LOS CONDES PEDRO ANSÚREZ (PRECEPTOR Y MÁXIMO HOMBRE DE CONFIANZA DE ALFONSO
VI) Y GARCÍA ORDÓÑEZ, QUIEN SERÁ ENEMIGO IRRECONCILIABLE DEL CID. CURIOSAMENTE, AMBOS SERÁN CONSIDERADOS LOS PRINCIPALES INSTIGADORES EN EL TEJIDO DE “RENCILLAS” QUE EMPUJARÁ AL CAMPEADOR A SER DESTERRADO DEL REINO DE CASTILLA.
LA UNIÓN ENTRE DOÑA JIMENA Y DON RODRIGO ES INTERPRETADA COMO UNA ESTRATEGIA DE ALFONSO VI CON LA QUE PRETENDÍA LIMAR ASPEREZAS E INTEGRAR A LAS NOBLEZAS CASTELLANA Y LEONESA. SIN EMBARGO, ESTUDIOS REVISIONISTAS DE HABLA INGLESA –TILDADOS DE MANTENER UNA ESPECIE DE “CIDOFOBIA”– CUESTIONAN EL SUPUESTO ORIGEN ARISTOCRÁTICO DE DOÑA JIMENA. CONSIDERAN QUE LA CÉLEBRE CARTA DE ARRAS ES UNA FALSIFICACIÓN DE FINALES DEL SIGLO XII QUE HABRÍA SUFRIDO VARIAS INTERPOLACIONES DESTINADAS, EN ESTE CASO, A ENNOBLECER LA ESTIRPE DE LA QUE FUERA FIEL ESPOSA DEL MÍTICO HÉROE CASTELLANO...