SABÍAS QUE...
LAS RUEDAS PUEDEN
sufrir desgastes ajenos al kilometraje por una alineación inadecuada de la dirección, por el desequilibrio de pesos del conjunto llanta/ neumático, por problemas de la amortiguación, presiones inadecuadas, etc. Por eso hay que vigilarlos periodicamente, a fin de detectar cualquier anomalía que lleve a un desgaste no uniforme.
DESDE 2017 TODOS LOS
vehículos nuevos deben llevar obligatoriamente instalado un sistema de control de presión de los neumáticos (TPMS), que en caso de pérdida de aire manda un aviso al conductor a través de la instrumentación.
QUE LOS NEUMÁTICOS
sigan pinchándose es algo inevitable, pero la industria ya ofrece algunos capaces de rodar sin aire. Se los denomina «runflat» y por sus características pueden rodar pinchados, por lo general, hasta 80 km/h durante unos 80 kilómetros.
LOS NEUMÁTICOS DE
invierno son obligatorios en algunos países europeos, normalmente los que sufren muy bajas temperaturas y condiciones climatológicas extremas durante periodos prolongados. Hay que vigilar su uso con temperaturas superiores a los 7º C, porque de ser continuada esta situación no sólo perjudica a su rendimiento, sino que se acelera su desgaste.